A Josep Asensi, que
aprecia estas sutilezas.
Tú que frecuentas el foro,
noble Mario, dime:
¿Quién azuzó al león contra
la cabra?
- No digas barbaridades,
Lucio, pues ha sido justo al revés:
la cabra corneaba al león
y el pobre animal sólo se ha
defendido.
*Relieve en una fachada del
antiguo guetto de Roma. Foto: Rafa Lillo.
NOTA: Queridos amigos, poco
a poco voy a recuperar la normalidad en el blog. Empiezo a visitaros.
La razón del león, sin duda. Pobre cabra.
ResponderEliminarPobre cabra, en su frenesí montuno, siempre tendrá las de perder. Los leones saben bien el juego.
ResponderEliminarBesazo
Isabel, eres brillante cuando eres sutil y cuando eres evidente.
ResponderEliminarComo de costumbre, un diez.
P.S.- gracias por la dedicatoria.
¡El león a los leones! Que una cabra hubiera servido para hacer un buen asado, que pena de cabra y que hambre me está entrando.
ResponderEliminarColocamos la carne de cabra en la bandeja del horno, le haremos unos cortes donde introduciremos unas rodajas...
Hummmmm, deliciosa.
Buenísimo, Isabel. Bien podría ser humor de nuestros tiempos y así llevaría mensaje. Pobre león.
ResponderEliminarHola pedro ojeda escudero, la razón es siempre del que tiene la fuerza. Al menos la razón y la fuerza brutas. Besos.
ResponderEliminarHola virgi, la pobre cabra no hacía nada... ¿cómo iba a atacar a un león? Pero el león es el que tiene la voz más fuerte, y la fuerza. Besitos.
Hola josep asensi, gracias por tu apoyo siempre incondicional. Al escribirlo, esta tarde, me he acordado de tí. Besos.
ResponderEliminarHola unjubilado, no me extraña que pienses en la cabra y en el horno aunque, para serte sincera, más bien creo que nos están comiendo crudas. Besos.
Hola francisco, es humor de nuestros tiempos. Lo que es antiguo es el relieve... y ese imperio del fuerte sobre quien es más débil. Besos.
ResponderEliminarMuy apropiado para estos días donde los no armados son los que agraden. El mundo al revés, querida Isabel, o así nos lo quieren hacer tragar, brrr.
ResponderEliminarMuy buenas tus palabras, amiga.
Un beso enorme, que me alegra que estés de vuelta y recuperada.
Los leones son estrategas, pobre cabra a merced de uno de ellos. Un abrazo
ResponderEliminarDigno de fábula amiga mía,eh?!
ResponderEliminarP.D.:Ambos,tanto el león,como la cabra,son víctimas y dueños de sus instintos... ;)
BESITOS GIGANTEZCOS =))
No se, no se, la cabra lleva cuernos.
ResponderEliminarLo malo de ciertos leones es que además custodian el Parlamento. Ese al que dicen defender.
ResponderEliminarCorren malos tiempos para las pobres cabras famélicas e indefensas,
Celebro que ya estés recuperada. Un beso muy fuerte, querida Romana.
Muy apropiado para estos tiempos. Me alegro que ya estés bien.
ResponderEliminarBicos
Isabel.
ResponderEliminarMejórate y cuídate.
La cabra dirá que fue el león quien empezó la trifulca. Y el león dirá que fue la cabra...
Vale.
Bienvenida, Isabel. Claro, fue la cabra... ;)
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Buena excusa la que usa el león para tranquilizar su conciencia. Y lo peor es que no es el único.
ResponderEliminarTe devuelvo la visita con un sincero abrazo. Me alegro que hayas regresado
El desconocimiento de con quién te la juegas permite siempre al más fuerte justificar sus acciones.
ResponderEliminarMe ha alegrado infinito que te encuentres ya casi en plena forma, querida Isabel. Con un tirón más acabamos de estar en marcha. Pero, recuerda que lo más importante es acabar de encontrarte bien. Primero tú y nosotros podemos esperar, con desasosiego pero con calma.
Un fuerte abrazo, querida Isabel.
Cuidado que la cabra también es peligrosa cuando quiere. Igual pasa con los corderos contra el lobo o los ciudadanos contra los monopolizadores del estado.
ResponderEliminarSaludos
O que faltou aqui nesta estorinha foi o que falta em nossos países...JUSTIÇA!
ResponderEliminarUm abraço carinhoso, amiga Isabel e que estejas de fato bem.
Lo que faltaba en esta pequeña historia es lo que falta en nuestros países ... ¡Justicia!
Un fuerte abrazo, amigo Isabel y eres realmente bueno.
Voy a expresar mi opinión, aún a riesgo de no estar de acuerdo con ningún comentarista. Soy amante del Orden y la Disciplina y del Respeto a las Instituciones. Creo que la actuación de la Policía fue impecable, porque para eso está, para mantener el Orden. Creo que es una falacia malintencionada otorgar a los manifestantes la Presunción de Inocencia y aplicarles a los Policías la Presunción de Culpabilidad. Así no se puede ir por el mundo.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarCuando en una plaza de toros el toro agredido se defiende a cornadas ante los ataques del torero y, como consecuencia de ello, el torero muere, ¿quién es el culpable, el fuerte (el toro) o el presunto débil (el torero)?
ResponderEliminarEspero tu pronta recuperación guapa, tras varias semanas de ausencia apenas me entero.
ResponderEliminarBellísima parte de ese relieve de la fachada del antiguo guetto de Roma, en cuanto al texto, ya sabes, las cosas no son siempre como a primera vista parecen, por lo menos en este en este caso.
Se te recuerda venerable dama.
Es decir querida,cuando se trata de justificar lo injustificable....
ResponderEliminarLas técnicas oratorias para convencer son conocidas por cualquier dirigente.
ResponderEliminarUn abrazo, Isabel. Cuídate.
De hecho, el león mandó a un compañero vestido de cabra para que le cornease (lo justito) y poder apalear al resto de las cabras a placer. El que quiera ver, que vea.
ResponderEliminarMuy oportuno, Isabel.
Abrazos
Yo soy la hinchada de la cabra...
ResponderEliminarSiempre genial Isabel y, muy sutil como muy bien indicas al principio.Un abrazo.
ResponderEliminarBrillante, Isabel.
ResponderEliminarAbrazos fabulados.
Como el día 25 de septiembre en Madrid: no era la policía la que golpeaba, eran los manifestantes...
ResponderEliminar...totalmente de acuerdo con la autora de este blog . . . ROMA ES FASCINANTE....http://herodotohistoriant.blogspot.com.es/2012/10/el-corazon-de-roma.html
ResponderEliminarRecurro con frecuencia (después de un paréntesis) a este blog porque las fotografías son de una calidad extraordinaria (aparte otros méritos). Se nota que muchas son tomadas directamente, pues no se encuentran en Internet. Gracias.
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