Pobre muchacho. Tan bello.
Tan aéreo. Tan juguetón. Y, ahora, tan apenado después de probar, en su propio
corazón, los efectos de su veneno amoroso.
Queridos amigos: el próximo
miércoles 3 de mayo, a las 19 h. en el Museo de Historia de Valencia (MdHV),
hablaremos de este terrible diosecillo –muchos se alegrarán de que sufra un
rato– y de tantas otras historias que
nos cuentan las lucernas que alumbraban las noches de los romanos valentinos.
NOTA: Os pongo algunas fotografías de mis últimas actividades:
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| Jornada de Cultura Clásica de Banyeres. Con el Concejal de Cultura y el Profesor Slocker |
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| Banyeres. Teatro donde se celebró la Jornada de Cultura Clásica |
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| La llotja de Elche. Preparado para la conferencia en la Olimpiada Agon 3 |
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| Elche, Olimpiada Agon 3. Mi cabecita roja allá en el escenario. |
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| Con Mariano Estevan y Alberto Ochoa en el Centro de Estudios Alberto Sols de Sax |
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| En la presentación de mis novelas Perseo y la mirada de Medusa y Orfeo desciende a los infiernos. |
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| Firmando a quienes se animaron a disfrutar de los mitos. |
Gracias a todas las personas que me apoyan.
¡Enhorabuena, Isabel!
ResponderEliminarVale.
Enhorabuena, que vaya bien el evento. A Cupido hay que darle a probar su propia medicina, por gamberro. Niñato que no madura. Jejeje.
ResponderEliminarUn abrazo, Isabel.
Tu blog es tremendamente interesante :)
ResponderEliminarGracias, dhyego. Aquí sigo, dándole a la tecla y/o a la lengua. Un abrazo.
ResponderEliminarTienes razón, cayetano Gea, este niño no madura y mucho me temo que su ejemplo esté cundiendo... Besazos.
ResponderEliminarGracias, Marta. He visitado tu página y me ha encantado tu sentido del humor. Al fin y al cabo, es lo que nos mantiene con vida. Saludos cordiales.
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