“Anita penetró en las calles de Roma el 26 de junio de 1849. El
ininterrumpido bombardeo de la artillería francesa, el más brutal que ella
hubiera conocido nunca, dejaba un rastro de ruina, desolación y caos, casas
derruidas, callejuelas impracticables por los escombros, heridos y muertos
entre los cascotes, hospitales repletos de moribundos en cuyos pasillos no
cabía un alma más. Durante los primeros días del asedio las mujeres formaron
grupos para adiestrarse en el uso de las armas y, desde entonces, alternaban el
combate en las murallas con la atención a los heridos en hospitales
improvisados en casas e iglesias. Hasta los niños volaban en pedazos al
intentar apagar con trapos húmedos las mechas de las bombas. Roma parecía ya un
cadáver y, sin embargo, mantenía tenso el nervio del heroísmo.
Las cuestas que hoy se llaman vía Garibaldi y serpentean colina arriba
envueltas en una verde placidez, fueron el camino que Anita recorrió llena de
angustia aquel día. Ningún lugar ofrecía protección segura. Todo era ruido y
polvo, gritos y estallidos, bombas cuyo siniestro siseo, más terrorífico que el
de las víboras, reventaba al fin y escupía a su alrededor millares de pájaros
de piedra. Abriéndose paso entre la destrucción y la congoja, subía por primera
vez al Janículo en busca de su
marido.”
MUJERES DE ROMA.
Heroísmo, intrigas y pasiones.
NOTA: De esta y de otras mujeres hablaremos en la presentación del libro en Sax, este viernes, 14 de diciembre, a las 19,30 horas, en la Casa de Cultura de Sax, de la mano de D. Francisco Chico Rico. Serán bienvenidas todas las personas que quieran asistir.
NOTA 2: Os anuncio también
que el próximo miércoles, 19 de diciembre, estaré en la Casa del Libro de
Valencia conversando con los lectores y firmando ejemplares del libro a quienes
lo deseen, de 17 a 21 horas.
* Detalle del monumento dedicado a Anita Garibaldi en Roma. Fotografía de Isabel Barceló.
Dicen que la brasileña siempre estuvo en el corazón de Garibaldi, aún después de su muerte.suerte con la presentación de tu libro! Un abrazo
ResponderEliminar¡Sigue así Isabel. No conocía esta historia, pero es apasionante y te agradezco tus esfuerzos para compartir.
ResponderEliminar¡Un abrazo!.
Sergi.
Gracias, Neogéminis Mónica Frau. Fue un amor muy apasionado y romántico. También trágico, porque en tiempos de luchas tan duras era imposible un final feliz. Ella dio un ejemplo extraordinario de compromiso. Un abrazo muy fuerte, querida amiga.
ResponderEliminarHola, Sergi Torrents, la aventura de Anita en Roma fue breve pero intensísima. Sus cenizas están allí. Gracias por tus palabras de ánimo y un abrazo.
ResponderEliminarQué arrojo, qué corazón valiente, cómo me gusta conocerlas y de nuevo... cuánta poesía en la historia nos tras. Simplemente, demasiado. Una suerte que te hayan encontrado en Roma, querida Isabel, una suerte para mí leeros a todas por obra y gracia de tu pluma.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo..