El
valor de los mitos no caduca. Y es todo un rito encontrarlos representados en
algunos museos y hablar gozosamente de ellos. Esto haré en los próximos días.
“Pese a la brutalidad de la garra que la sujetaba, Hersilia
trataba de levantar la cabeza. Otros hombres, llevando consigo a muchachas que
pateaban al aire, llegaban al pie de la escalera de Caco que unía el valle con
la cumbre donde se ubicaba Roma. Oía la respiración jadeante de su raptor,
sentía su manaza apretarle las muñecas. De una manera vaga la alcanzaban las súplicas
infructuosas de las demás jóvenes, sus quejidos. Escuchaba también unas voces
enérgicas que, desde lo alto, impartían instrucciones y animaban a los ladrones
de mujeres a subir más deprisa los escalones tallados en la roca. Sintió
náuseas y vértigo. Alcanzada la cima y el poblado, Hersilia vio pasar a un
gigantón llevando bajo el brazo a una de sus primas, la más frágil, la más
bella. Su propio captor le gritó a ese hombre: “¿Dónde vas? ¿A quién la llevas?”
El hombre contestó: “¡A la casa del
noble Thalasso!””
“De MUJERES DE ROMA. Heroísmo, intrigas y pasiones”
- El próximo lunes, 18 de febrero, impartiré la
conferencia “Mujeres de Roma” en el Aula Cultural de Fundación Caja
Mediterráneo de MURCIA. C/ Escultor Salzillo, 7. A las 19.30 horas. Organizada
por ACDOMUR (Asociación Cultural de docentes de Murcia.
- El próximo martes, 19 de febrero, presentaré mi
libro “Mujeres de Roma. Heroísmo, intrigas y pasiones” en la Biblioteca
Regional de Murcia. Avda. Juan Carlos I, nº 27 de MURCIA. A laS 17.00 HORAS.
- El próximo jueves, 21 de febrero, impartiré la
conferencia “Eco y Narciso. Amores míticos en los salones del Museo Nacional de
Cerámica”. Palacio del Marqués de Dos Aguas. VALENCIA. A las 19.00 horas.
En todos los casos, la entrada es libre hasta
completar aforo.
Qué suerte van a tener porque contigo van todas ellas: las 44 y mucha historia y mucha magia y mucha poesía.
ResponderEliminarEnhorabuena por este magnífico periplo y por la obra ingente que estás dejando en tu pluma y en tu voz.
Un abrazo, querida amiga.
Unabrazo enorme, Elena Clásica, siempre tan benevolente con todo lo mío.
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