- Sea como tú quieres – le había concedido por fin su esposo, después de oír durante varias noches su llanto, sus ruegos y razones – Reúnete con tus hermanas si crees que te sentirás mejor. Pero he advertirte, una vez más, que no debes escuchar sus consejos ni mucho menos intentar saber quién soy ni qué apariencia tengo. Elude hablarles de mí. No vayas a estropear lo que tenemos, Psique, pues me eres más querida que mis propios ojos.
Psique lo colmó de besos y abrazos y le juró que por nada del mundo lo perdería.
Ahora tiene todos los sentidos alerta para captar la llegada de sus hermanas. Apenas las ve y las oye llorar y llamarla desde lo alto de la montaña, ordena al viento Céfiro, por encargo de su marido, que las transporte hasta el prado como hizo con ella. El reencuentro es maravilloso, pleno de sorpresa y emoción. Psique no se cansa de besarlas ni abrazarlas, de pedirles noticias de sus padres y de sus amigos. Luego, cogiendo a cada una de la mano, las conduce a su casa, donde las agasaja con baños, un selecto banquete y mil pequeñas atenciones. Sólo poder tocarlas y hablar con ellas le compensa de tantas semanas de soledad. Se esfuerza por demostrar que ya no es la adolescente llorosa que temblaba el día de la boda, sino una mujer casada y capaz de asumir su responsabilidad. Quiere que se sientan orgullosas de ella.
- ¿Has visto qué estúpida se ha vuelto? – dice la hermana mayor a la otra, en el único momento en que Psique las deja solas - ¡Estúpida y arrogante! ¿Qué se habrá creído?
- Desde luego – le responde la segunda – es la menor y parece que quiera ser más reina que nosotras. ¡A saber con quién estará casada…! – y dirigiéndose a Psique, que llega en ese momento, le dice – Querida hermana, seguro que tu marido, aunque no sea rey como los nuestros, estará bien situado en la sociedad. Háblanos de él, querida. Ardemos en deseos de conocerlo. ¿Crees que lo podremos ver?
- Es un muchacho muy bien parecido – responde Psique – al que le encanta cazar. Casi siempre pasa el día fuera. Pero mirad lo que tengo para vosotras.
Y entonces, las voces sirvientes les llevan collares, cinturones y fíbulas de oro enriquecidas con perlas y piedras preciosas para que escojan las que más les gusten. Como tienen dudas, Psique les ruega que se lleven todas las joyas. Ver a sus hermanas la ha complacido tanto, que nada es suficiente para expresar su agradecimiento. Antes de despedirse, les arranca la promesa de que volverán y, con lágrimas en los ojos, las contempla alejarse.
- ¡Creía que no podría soportarlo más! – dice una hermana a la otra después que el viento las devolviera a la cumbre de la montaña - ¡Qué pegajosa! Muchos besos y muchos abrazos y mucho decir que nos quiere y bla, bla, bla, pero ¿te has dado cuenta con qué fatuidad nos ha dado estas miserables joyas? Sus migajas, porque ella tiene muchas más. Nos ha ofrecido las peores.
- Y no ha dicho una sola verdad respecto a su marido. Un monstruo, de eso estoy convencida, pero muy rico. ¡No veo por qué hubo de ser ella la elegida…! No se lo merece, la muy boba.
Su ira crece a medida que bajan de la montaña en dirección a la casa de sus padres. Ver las riquezas y la felicidad de su hermana las ha enfurecido. Sus respectivos maridos son reyes, pero ancianos. Y sus riquezas consisten en tierras y ganado, nada que se parezca a esa mansión de oro en la que vive Psique.
- No dejaré pasar esto – dice por fin la mayor – Lo que tiene ella me corresponde a mí, que para eso nací la primera, o a ti en todo caso. No digamos a nuestros padres que la hemos encontrado y finjamos que la creemos muerta. Hemos de pensar deprisa en un plan para darle una lección. ¡Prepárate Psique…! – dice riendo con un rictus de rabia – ¡Ya lo creo que pensamos volver!
* Cabeza femenina. Museos Capitolinos
** Fragmento de relieve. Museos Capitolinos
***Joyas romanas. Museo Massimo alle Terme
****Rosaleda pública en la colina del Aventino.
Pobre Psique tan ingenua y honesta..tiene en cambio dos hermanas malvadas, envidiosas y metidas me recuerdan a Griselda y Anastacia..
ResponderEliminarno merecen tanta generosidad!
Me encantan las fotos y los detalles que escoges para tus textos. Son tuyas?
Un abrazo y feliz fin de semana!!
Hay acaso algo más repugnante(en la mitología),que la envidia de la cual todos se veían teñidos?!
ResponderEliminarNo quiero explayarme demasiado porque arruinaría la sutileza de tus textos...
Confieso que la mitología me atrapa!
Además estoy fascinada por tu narrativa!
Besitos...
He leìdo el IV y V, asì como quien no quiere la cosa. Extraordinarios los dos textos, impecable redacciòn y una sòlida descripciòn del amor y las envidias que despierta. Abrazos.
ResponderEliminarPobre psique, que malinterepretados son todos sus sinceros gestos por los ojos de la envidia fraternal.
ResponderEliminarUn beso.
No peor enemigo de una mujer que otra mujer...y Psique, engañada en sus riquezas, en el amor y en lo filial, hasta dónde aguantará tanta inocencia!!!
ResponderEliminartan tontona... porque siempre los personajes femeninos tenían que ser así?? por qué tenían que fomentar la peligrosidad y la tontera en las mujeres?? por qué se llenaban de valores negativos que más causaban temor y rechazo que ganas de quererlas y cuidarlas!! ahhh claro, porque era una escritura masculina, misógina... y entre ellos sólo era el amor virtuoso.. ellas no servían ni para criar a sus hijos...
ResponderEliminarSigo atrapado con tu narración, con tu pictórica forma de escribir, lo leo, lo veo y mi estómago (entrañas) se resiente.
ResponderEliminarPermíteme una duda, con humor. ¿Estará basada "Cynderella" (La cencienta) en tu pasaje de Psique?.
Sigo esperando ver al "monstruo",
Javier
Pobre Psique, despierta envidias hasta de sus hermanas aun cuando se esfuerza por ser generosa… Por eso dicen que hay que guardar discreción con los logros en la vida. Me había atrasado con el cuarto y quinto capítulo, pero ya me puse al día… =)
ResponderEliminarSaludos, Isabel
A estas alturas del relato, ya es tarde para aconsejar a Psique "si eres feliz, escóndete. No se puede andar cargado de joyas por un barrio de mendigos.No se puede pasear una felicidad como la tuya por un mundo de envidiosos".
ResponderEliminarLa suerte está echada...
Un abrazo
Psique sufre las contingencias tan humanas y lamentables de la envidia. Es muy interesante ver el desenlace de esta historia realmente atrayente.
ResponderEliminarCariños
.
la cosa está poniéndose tensa, bien utilizada la técnica del suspense, en serio, tengo muchas ganas de que llegue lo próximo, no sé si me podré aguantar... de verdad, me encanta. un fuerte abrazo y gracias por escribir.
ResponderEliminarSalud
¡La envidia, la envidia,! el motor de la humanidad
ResponderEliminarSaludos
Me acabo deponer al dia.
ResponderEliminarEmocionante y precioso.
Saludos.Es un autentico placer leerte
Hola tic-tac, creo que los gestos de Psique son interpretados por sus hermanas desde el prisma de su propia envidia. Si le reconocieran virtudes ¿cómo podrían desearle mal?
ResponderEliminarRespecto a las fotos, son de mi marido y mías. En esta serie seguramente pondré algunas fotos que me han proporcionado amigos, y en ese caso lo indicaré al pie, donde indico la procedencia de las piezas. Gracias por todo y buen fin de semana para tí también.
Hola gabu, coincido contigo. Y en la medida en que la mitología reflejaba a los seres humanos, no hay duda que sus creadores percibían la envidia como uno de los sentimientos más abundantes y peligrosos. Sin embargo, es un sentimiento sobre el que convendría pensar. Gracias por tu apoyo, guapa.
Hola fgiucich, tiene su mérito leer dos posts seguidos. Me alegro de que lo hayas superado con éxito. Besotes.
Hola vade retro. Psique es casi una niña, una adolescente que ha salido de su casa para casarse con un monstruo. No sabe nada de la vida ni de su propio esposo. Temo que deba aprender con dolor(como todo el mundo...)Besazos.
ResponderEliminarSaludos, carlos a. gamboa, querido amigo. Deja que te diga con el mayor afecto que el peor enemigo de una mujer no es otra mujer. ¡Ese mensaje es cosa vuestra (de los chicos), que así quedáis como angelitos...! Creo que la rivalidad está en la relación fraterna (en este caso entre mujeres, pero mira Caín y Abel...) Coincido completamente contigo al entender que Psique vive engañada en el amor. Un esposo que aisla a la esposa de todo contacto humano, ¿cómo lo llamaríamos hoy? Estos mitos tienen mucha miga y, desde luego, admiten muchas lecturas. Gracias por la tuya y un millón de besos.
Elisa de cremona, estás hoy muy combativa. Coincido contigo en que el retrato femenino que se hacía (y se sigue haciendo) era muy negativo. Lo que también nos permite ver hasta qué punto tergiversaban las cosas. La suerte es que nosotros podremos leerlo hoy como queramos. Y podemos leer que Ps está sola, aislada, con un marido-monstruo desconocido, sin saber nada de la vida ni tener posibilidades - de momento - de aprender. A mí no me parece que sea tonta. Me parece que es inmadura, que le falta un saber de la vida que sólo la vida en sociedad le puede dar. ¿Y qué decir del marido? Besazos combativos.
Hola javier, no tardaremos demasiado en ver al monstruo. Pero sus actos son, desde cierta perspectiva, monstruosos ¿no? Pide a una jovencita amor, obediencia, y que viva sólo para él, mientras él permanece en la sombra, sin rostro, sin nombre, sin historia... ¡Tela marinera! En lo relativo a los cuentos infantiles, sospecho que muchos de ellos derivan o se inspiran en los mitos. Creo que, generación tras generación, vamos transmitiendo mensajes a través de historias que se han manifestado eficaces. También sigue la lección: que la envidia, aunque pueda dañar al personaje envidiado, termina por aniquilar al envidioso. Besazos.
ResponderEliminarHola martín, también opino que hay que ser discreto con los logros propios, sobre todo para no herir al otro, más que para evitar la envidia. Esta envidia malsana, con frecuencia, está inspirada más en la propia insatisfacción del envidioso que en los logros del envidiado. En fin, ese es un tema de lo más interesante. ¿No te animarías a escribir algunas reflexiones al respecto? Una invitación que hago extensiva a todos los demás, muy asumible porque ¿quién no ha ha experimentado, o no ha sufrido la envidia de otro alguna vez? Ya me dirás si te animas. Besos.
La envidia es tan mala consejera... Las hermanas deberían estar agradecidas a los dioses por haberle concedido tal favor a Psique, en lugar de lamentar no haber sido ellas las afortunadas.
ResponderEliminarHola marian, exhibir felicidad en un mundo de desdichas parece una provocación, pero no estoy segura de que la felicidad se pueda ocultar. Hay gente a la que sólo con verle la cara se sabe que es feliz, como a otra se le ve la tristeza. En cualquier caso, no sé si es feliz Psique. Fíjate que es su marido quien habla de felicidad, no ella. Él tiene lo que quiere y como quiere, mientras ella se ha visto apartada de su familia y privada de una vida que podríamos llamar "normal". Es la necesidad de contacto humano la que la empuja a actuar así con sus hermanas, obsequiarlas, tratar de hacer lo posible para que ellas se sientan satisfechas y vuelvan... No se puede ser feliz cuando se es rehén de alguien, por afectuoso que sea ese alguien. El amor es una conquista, creo yo. Besos y hasta pronto.
ResponderEliminarHola rodolfo n, creo que esta historia no nos decepcionará. Y lo mejor es que da mucho que hablar, tiene aristas y matices que la hacen muy interesante, en mi opinión. Saludos cordiales.
Hola harri reddish, seguro que puedes aguantar, ya lo verás...tenemos que ir forjándonos con Psique en sus desventuras... Besazos.
Manuel, qué optimista estás hoy o qué pesimista estoy yo. ¡Piensas que la envidia es el motor del mundo y yo creo que es un lastre! Aunque quiza, tengamos razón los dos. Un millón de besos.
Hola churra, es fantástico que te hayas puesto al corriente, porque las emociones no han hecho más que empezar... Besos y hasta pronto.
Hola david. Deberían... pero la naturaleza humana es muy débil y alegrarse del éxito ajeno la pone a prueba... Besos.
ResponderEliminarPero qué arpías!!. Estoy indignado, ¿cómo puede ser que la felicidad ajena despierte sentimientos tan bajos?. ¿Y cuándo va a abrir los ojos Psique y dejer atrás a estas vívoras?.
ResponderEliminarEspero más, eres altamente adictiva.
Saludos!!
Leidos el cuarto y el quinto, uno se va empapando de esta Roma tan particular que ofreces, y que sin ninguna duda, enriquece.
ResponderEliminarBesos de fin de semana.
Dioses del Olimpo, un poco de amparo para Psique antes de que se desate del todo la envidia y la codicia de sus hermanas!
ResponderEliminarPasando a saludarla y a segir encantandome con tu linda escritura...
ResponderEliminarMil cariños, Priscila
Me cuesta ponerme al día con tus textos porque estoy algo desconectado de la blogosfera pero merece la pena... Un saludo
ResponderEliminar...mi niña linda...toda la suerte del mundo para quien va a enfrentarse con peor y más horrible monstruo humano...la envidia y los celos...por cierto, estoy de vacacioneeees...gracias por darme algo para leer :)
ResponderEliminarBesote
Isabel ...la pobre Psique entre dos emociones insanas , lo celos , la envidia, me la imagino inocente, para aceptar tantas cosas. Pero qué sería de Cúpido sin Psique?. Pienso que él con su amor borrará todo lo insano, que recibe ella y puede ser que la haga feliz...te sigo leyendo, genio de las letras!.
ResponderEliminarBesos.
diviso un sino fatal? psique soportara
ResponderEliminartanta infamia,cautivantes escritos prometo volver.saludos y gracias por pasar.
La envidia empezando desde el hogar con los hermanos.
ResponderEliminarEspero que no sufra Psique con lo que le viene.
Besos
¡¡Esas odiosas!!! pero que cosaaaa... :)
ResponderEliminarDe todos modos, sin la curiosidad de Psique, la envidia de las hermanas no hubiera surtido efecto... :)
Te voy leyendo y busco referencias en la red por tratar de saber algo mas, en esta ocasión he encontrado este enlace:
ResponderEliminarAnatomía de un beso
Un abrazo
Hola eggy, es inevitabe indignarse con esas harpías. A Psique le falta edad y, sbre todo, experiencia. Me encanta tu adicción. Besos.
ResponderEliminarHola rafael p.q., el mito de Psique es griego pero, curiosamente, hemos recibido la historia a través de un escritor latino, Apuleyo. Quizá él le dio un tinte romano, no sé. En cualquier caso es un mito muy presente en aquella socidad. Saludos cordiales.
Hola dilaca, temo que los dioses no estén muy por la labor de ampararla. En el primer capítulo Venus estaba que trinaba. Besos.
Hola magnolia&leon, ya ves que seguimos con el tema del amor. Gracias por tu visita.
ResponderEliminarSaludos, caboblanco, te echaba de menos. Si estás un poco alejado de la blogosfera, es todavía mayor honor y placer que vengas por aquí, donde está tu casa. Saludos cordiales.
Saludos a iralow de vacacioneeeees. Psique necesita de todo nuestro apoyo y comprensión, porque la embestida que la aguarda es fuerte. Besos y que disfrutes un montón.
Hola Daniellha, creo que las pruebas que aguardan a Psique la harán madurar. Y el amor... el amor mueve el mundo. Besos, querida amiga.
Bienvenido (--blackrabbit--), parece, en efecto, que el destino de Psique está marcado. Pero nadie lo puede asegurar. Espero que nos encontremos de nuevo. Saludos cordiales.
ResponderEliminarHola Clarice baricco, donde hay convivencia surgen un millón de problemas...y son los más difíciles de encajar. Besitos.
Hola dark eurídice, tienes razón, pero...¿habría curiosidad si no hubiese misterio? He aquí la cuestión. Besazos.
Hola unjubilado, ¡no paras...! He visto el enlace y está muy bien. Su autor es muy conocido en la blogosfera relacionada con la cultura clásica. Gracias y sigue trabajando... Besos.
Saludos te sigo escribiendo
ResponderEliminarbuen artículo
ResponderEliminarHola soleil y sin nombre, gracias por vuestra visita. Espero que nos frecuentemos. Saludos cordiales.
ResponderEliminar...te he querido devolver la visita y agradecer tu ánimo y...oh!...he descubierto tu hermosa narrativa. Un placer.
ResponderEliminarqué historia!!!
ResponderEliminarme atrapaste absolutamente,
Psique tan humana, tan linda...
te sigo, me quedo a saber, conocer y sentir..
gracias!
Siempre es un delicia entrar en tu casa y si me permites me quedare un buen rato, recordando esta historia tan bella como apasionante
ResponderEliminarGracias, besos.
Que mala es la envidia, pobre Psique, está condenada y lo que es peor, por su spropias hermanas...
ResponderEliminarUn abrazo
Hola nadaquedemostrar, celebro tu visita y espero que nos frecuentemos. Saludos cordiales.
ResponderEliminarHola lis, la historia de Cupido y Psique es muy emocionante. Algunos aspectos nos son familiares por los cuentos infantiles - sin duda inspirados en este mito - pero otros están aún por descubrir. Besos y hasta pronto.
Saludos, morgana, aquí estás en tu casa y eres bienvenida siempre. Actualizar los recuerdos sobre estas historias tan hermosas nos confortan, creo yo. Besos.
Hola, trini, las traiciones en el interior de la familia son las que más duelen, como dejas entrever en tu comentario. En fin, todos/as conocemos algún caso. Saludos cordiales.
Llego a este blog desde el de Harry Reddish y la verdad es que no puedo más que alegrarme de pinchar ese enlace. Gran blog.
ResponderEliminarMuy interesante relato querida, le quería pedir el número de alguna de las hermanas, porque tenemos que suplir unas bajas.
ResponderEliminarLe ha salvado el hecho de que Psique fuera chica, de haber sido un mozo, todas las feminiistas de la tierra se habrían lanzado ya al cuello de su magnífico blog.
Sufro muchas veces por falta de tiempo, pero una oportuna convalecencia me ha dado el lapso para disfrutar de su afición y su forma de escribir. Gracias.
¡Qué mala malísima es la envidia...!
ResponderEliminarMe gusta como escribes, es un tema apasionante. Te felicito.
Besos. Helena.
Bueno, bueno, bueno...
ResponderEliminarEntraste en Ontherorro y me abriste otra ventana al más allá (al más allá de mi mundo).
Te leeré, agradecida.
Me has enganchado.
Saludos.
Envidia e Inocencia, que aciaga pareja.
ResponderEliminaracabo de hacer un paseo por el blog, está bueno, me gusta, y me tendré que poner a leer el resto. saludos.
ResponderEliminarYa me sabía la historía, me encanta la mitología griega, pero el toque personal y cómo la cuentas me entusiasma.
ResponderEliminarBesos!!!
He leido las dos ultimas entregas pero te dejo comentario en esta.
ResponderEliminarQue mas monstruo que esas hermanas, aunque la palabra monstruo es excesiva. La atribulada Psique tiene otros valores y debera demostrarlos. Hasta ahora aturdida por tanto agasajo y lujo encuentra en la soledad y la naruraleza su refugio, su cable a tierra.
Disfruto mucho leyendote.
Un gran beso.
Sin vueltas, las hermanas de Psique son dos yeguas, pero eso no es nada nuevo, sucede a menudo.
ResponderEliminarHola ottinguer, celebro que vengas de casa de harry reddish, un amigo. Espero que vuelvas y sigas con emoción estas aventuras. Saludos cordiales.
ResponderEliminarHola luzbel guerrero, creo que a estas malvadas debes tenerlas en alguno de los pucheros ardientes que tienes por ahí. Pero creo que hay versiones modernas, así que no tendrás problemas en cubrir bajas... Espero que te hayas recuperado de tu convalencia y, aunque esté mal decirlo, me alegro si en algo te ha ayudado el venir por aquí. Besos y hasta pronto.
Hola salón de sol, me alegro que te guste este sitio. Y mira, tienes un hombre de lo más mítico... Besos y hasta pronto.
Hola nina fashion, me alegro haber abierto tu ventana y que tú también hayas abierto ésta. Espero que nos visitemos con frecuencia. Saludos cordiales.
Hola mirtho nectar, tienes toda la razón, esa combinación es de lo más peligrosa. Y en breve se va a ver. Gracias por tu visita.
ResponderEliminarHola p.s., si vas a darte un paseo por el blog, tómatelo con calma, porque ya hay bastante escrito. Me alegra que te interese. Saludos cordiales.
Saludos, chanchiss, creo que cada cual contaría esta historia de una manera distinta, aún teniendo un tronco común. Me gusta que te guste ésta. Besos.
Hola máximo, gracias por venir y leer. Creo que Psique se siente muy, muy sola. Y muy indefensa. Una situación peligrosa. Besos y hasta pronto.
Hola lenguadefuego. Cuando repasamos estas historias antiguas nos damos cuenta de que aún estamos ahí, por más que seamos capaces comunicarnos de esta manera tan rápida y hermosa. Como seres humanos, hemos avanzado poco (o casi nada). Saludos cordiales.
Un monstruo, de eso estoy convencida, pero muy rico. ¡
ResponderEliminarsiempre con un enredo espectacular que prende la leitura...
beijos romanos, perdón.. europeus, yaya
TAMBIÉN PASA EN ESTOS DÍAS ...
ResponderEliminarLA INGENUIDAD DE PSIQUE
" ENGORDA " A SUS HERMANAS , LA MALDAD AFLORA EN ELLAS .
SIGO CONECTADO .
SALUDOS ISABEL
QUE TENGAS UN BUEN DÍA
ADAL
La envidia...algunos dicen que existe una buena envidia y otra mala, destructiva...distingo envidia, codicia y ambición.
ResponderEliminarpareciera que la hermana mayor adolece de las dos primeras con gran intensidad.
Me gusto mucho tu relato de psique y eros... a la espera del siguiente cápitulo
La envidia...algunos dicen que existe una buena envidia y otra mala, destructiva...distingo envidia, codicia y ambición.
ResponderEliminarpareciera que la hermana mayor adolece de las dos primeras con gran intensidad.
Me gusto mucho tu relato de psique y eros... a la espera del siguiente cápitulo
Ay pobre Psique. Esta bueno el texto. Que bueno que te gustó mi poema. Y vaya que a ti si te dejan mensajes. wow. Saludos.
ResponderEliminarLa envidia uno de los "motores" mas terribles de la humanidad.
ResponderEliminarEn pos de la envidia se han hecho grandes movimientos en la historia.
Como todo en esta vida es muy cvontradictorio. Depende desde
que punto de vista lo mires.
ResponderEliminarUn arazo.
Me quedo en dos partes. Me pasa por no controlar bien mis deditos...jaja.
Vaya envidia!!!!
ResponderEliminarY de sus propias hermanas!
no sé por qué, pero tristemente, no me sorprende...
Pobre Psique... y a esas dos arpías, no podemos volverlas mudas???
Besos romanos
Soy romana de adopciòn, tengo marido y dos hijos romanos, por esto te puedo decir que me emociona tu amor por roma, que es bello porque nace "dal sapere". ciao
ResponderEliminarMe encanta la historia de eros y psique... te estoy siguiendo espectante.
ResponderEliminary sobre todo me gusta ese trato que das al alma, la inocencia de la pequeña adolescente, como vistes la envidia de las hermanas mayores, pero sobre todo me ha impresionado la parte en la que psique se entrega a su destino sin rechistar, viendose a abocada a un matrimonio incierto, no solo por obedecer a sus padres si no al destino que le prepara el oráculo.
Un saludo.
Que envidia siente esas hermanas, hasta llegar el punto de decirle a sus padres que no han encontrado a Psique, cada día me gusta más esta historia, bellas imágenes felicitaciones para tu esposo y para ti
ResponderEliminarUn beso
Me gusta leerte desde mi analogía del mito clásico y ésta del siglo XXI. Me encuentro facinada con los monstruos y me es aún un misterio completo lo relativo al esposo de Psique. Un monstruo fuente de abundancia? Y las hermanas añorando esa abundancia... (El monstruo). Como siempre me fascinas desde el otro lado del charco. Un beso
ResponderEliminarKarina Falcon
Hola mixtu, siempre hay algo que prende la lectura, como tu dices. En cualquier historia. A condición de que te guste leer, claro. Besos europeos y muy romanos.
ResponderEliminarHola hippie viejo, hay mucha inocencia y mucha maldad en nuestros días, como bien dices. Una experiencia terrible perder la inocencia de un modo tan brutal como le va a ocurrir a Psique. Que tengas buen día, amigo Adal.
Hola agar, tienes razón en que deberíamos afinar un poco esta idea de la envidia. Creo que cuando se habla de envidia sana más bien ser referirían al deseo de llegar a ser como la persona a la que admiramos, a la emulación. Coincido contigo en que parte de la envidia de las hermanas es codicia. Real como la vida misma. Salugos cordiales.
Saludos eduardodegortari, gracias por tu visita. Espero que sigas las peripecias de Psique, que nos tiene a todos en vilo. Te visitaré. Saludos cordiales.
Hola foton, el de los dedos ligeros. Todo es contradictorio, como muy bien apuntas. La envidia o la palabra "envidia" puede encubrir injusticias. Hace falta reflexionar al respecto. Besos.
ResponderEliminarHola mª antonia moreno, no sólo no podemos volverlas mudas, sino que en breve van a hablar más y más... tremendo lo que se nos viene encima. Besazos.
Salve liliana cordovero, esto sí que es un bello hallazgo: una romana de adopción, afincada (supongo) en la ciudad eterna. Me alegro de que nos hayamos encontrado, estoy segura de que compartimos una pasión romana y que la disfrutaremos juntas. Gracias por tu visita y hasta pronto.
Hola medraina, comprendo que te haya impresionado esa docilidad y aceptación del destino, tan fatalista. Psique piensa que no puede oponerse a la voluntad de los dioses, y sin embargo...algo la mueve. Besos y hasta pronto.
ResponderEliminarHola, alida, las malvadas hermanas de Psique tratarán de hacerle un daño irreparable a través del cual beneficiarse ellas. Vamos, lo que hacen en la actualidad algunas personas e incluso gobiernos, y no sobre una persona, sino sobre pueblos enteros... Este es un mito al que conviene prestar atención. Gracias por tus felicitaciones, se las transmitiré al fotógrafo consorte. Besos.
Hola, una de las moiras...¿o gorgona?. Comprendo tu fascinación por los monstruos, siempre tienen algo que nos atraen, aunque no podamos decir exáctamente qué. Y has dado en la diana al decir que las hermanas lo desean. Creo que este monstruo te encantará. ¿Te animarías a escribir en tu blog - cuando te parezca oportuno - esa lectura del mito desde la actualidad? Sería fantástico y muy ilustrativo para todos. Saludos y hasta pronto.
La envidia... qué mala es :-(
ResponderEliminarSiempre igual
Un besito
Hola aynara, es uno de los males de los que a mí me gustaría escapar. Besazos.
ResponderEliminarMe he quedado con el regustillo de la tormenta...
ResponderEliminarQue mala es la envidia...
Un saludo!!
Isabel: en primer lugar gracias por visitarme, muy valioso tu comentario. Espero que sigas pasando (cuando lo desees).
ResponderEliminarTus relatos me hicieron acordar a mi penúltimo año del secundario, donde adoré aquel que narraba el infortunio de Apolo en cuanto a Dafne. Lo sentí tan propio en su momento... Qué puedo decir de Psique, la descripción de un alma inocentemente genuina, una hermosura.
saludos, marian
Pues ya verás, ya, varo, porque va a subir vertiginosamente la temperatura. Besos.
ResponderEliminarSaludos, apologista de turno, un placer recibirte en mi casa. Todos estos mitos suelen evocarnos momentos muy entrañables de nuestra adolescencia y primera juventud, tan vinculados al descubrimiento del amor y de la decepción. Me alegra haber contribuido a tu recuerdo. Espero que nos frecuentemos. Saludos cordiales.
Hola.. pues me siento extraña...
ResponderEliminarDejé un mensaje creo qeu la semana pasada, y no lo veo, ni la respuesta, ni nada... :-( Pregunté si la trama total, al unir los textos es tuya, porque esta historia, esa soledad, la declaración todo, todo es demasiado bello... Está precioso...
Un gran y fuerte abrazo amiga.
mor... eso es loq eu se respira aquí... Felicidades por eso.. y es por eso que cada vez que quiero ceer otra vez en el amor vengo por aquí, para ver que si existe... Un fuerte abrazo
ResponderEliminarUpps.. amiga es tanto el deso de escribirte que incluí un comentario para otro blog... jijiji ya estoy muy cansada eso es.. la hora del día... El comentario tuyo es el primero.. lo siento.
ResponderEliminarLa envidia no es solo de humanos,también los dioses y seres extraordinarios que pueblan la mitologia se ven copadas de ella, asi el comportamiento de las hermanas de Psique,llenas de curiosidad maliciosa ante la felicidad de Psique, la atormentaban con preguntas capciosas para hacerla sufrir y crearle la duda sobre su esposo. Besitos nina
ResponderEliminaray ay ay me ausento unos dias y ya se viene la tormenta!!!! q bien q manejas el suspenso Isa!!!!!! siempre me quedo con ganas de mas!
ResponderEliminarBesitos de hada!!!
Acabo de leer los dos últimos posts seguidos... como siempre mágnifica historia. La envidia no estoy segura de que mueva el mundo, pero muchas veces lo estremece.
ResponderEliminarTe sigo leyendo. Saludos.
Esta bueno el texto,aunque me hubiera gustado un final contundente,como los de Borges.
ResponderEliminarHola con sal en los labios, no recuerdo a qué comentario anterior te refieres, quizá fuera una mala jugada del sr. blogguer. Respecto a tu pregunta, te diré que esta fábula fue narrada por un escritor latino del siglo II, llamado Apuleyo. Es a él a quien sigo. Así que la invención no es mérito mío.Gracias por tus palabras, me anima saber que mis amigos/as lectores/as disfrutan y sienten que les merece la pena venir por aquí. Descansa, querida amiga, que no es bueno tanto trasnochar... Besos y hasta pronto.
ResponderEliminarHola nina, los dioses antiguos reflejaban las pasiones humanas. Quizá el colocarlas "en alto" y fuera de los personajes conocidos, les permitía hablar con libertad, criticar y reflexionar acerca de ellas sin que se ofendiera el poderoso de turno. Porque claro, luego llega la venganza... Besitos, querida nina.
Hola hada aurefaire, en asuntos divinos no se puede una descuidar ni un instante. Enseguida pasan cosas tremendas, cataclísmicas... Besitos, llegas a tiempo de presenciar en directo más catástrofes.
ResponderEliminarHola elena, me parece muy oportuna y aguda tu observación acerca de la envidia. Nos estremece. Y no sabemos demasiado bien cómo evitarla... Saludos cordiales y hasta pronto.
Hola leo zelada grajeda, tienes razón al sugerir que un final contundente da mayor fuerza a una historia. No obstante, al tratarse de posts que constituyen una historia en varias "entregas", no hay finales sino puntos suspensivos... Por lo demás, la historia es una recreación de la escrita por Apuleyo. Gracias por tu visita y saludos cordiales.
Hay que ver en las historias lo mal que se lleva los hermanos...
ResponderEliminarY en la vida real, niha. O, al menos, yo conozco a algunos. Besos y hasta pronto.
ResponderEliminarEl complejo de inferioridad haciendo su aparición...decía coehlo en uno de sus escritos que el complejo de inferioridad y la duda, son de las herramientas más usadas por satanás...Saludos!
ResponderEliminarVaya dos largartas...
ResponderEliminarComo siempre suele ocurrir, se envidia lo que se ve en la superficie sin saber que cada uno y cada una tiene su ración de desgracia.
Qué triste es constatar, una vez más, que lo mejor y lo peor anida en la familia.
ResponderEliminarHola the_saint_myt, satanás está muy hecho y entrenado a trabajar con esos materiales y seguro que le da buenos réditos. Besitos.
ResponderEliminarSaludos anilibis, muy aguda tu apreciación: se envidia sin saber, sin haber llegado al fondo. Es así de irracional y de injusto. Besos.
Hola francisco ortiz, completamente de acuerdo contigo. Besos y hasta pronto.