viernes, febrero 23, 2007

DIDO Y ENEAS (XIV).- Vuelta al mar.



Cuando la Aurora se presentó para anunciar la llegada del día, encontró en plena actividad la playa. Se necesitaba madera para reparar las naves y tallar nuevos remos. Habían salido ya los cazadores, las hachas se preparaban para abatir los árboles y, formando corros, hombres, mujeres y niños remendaban velas y redes. La tarde anterior, Iskias, cargándolo sobre su hombro, había llevado al Náufrago herido hasta el campamento. Lo tumbaron cerca del fuego, le extrajeron la punta de la flecha, cauterizaron la herida con un hierro al rojo vivo y le dieron a beber una infusión de hierbas curativas.

Escuálido, con las ropas desgarradas y cierta torpeza al hablar, de no ser por la barba enmarañada hubiera parecido un niño. Cirene había pasado la noche cerca de él, vigilando su sueño, y al amanecer trajo agua del arroyuelo y lo aseó. También acudió a su lado Ascanio. Él sólo había querido ver con sus propios ojos a la ninfa Sao, y sentía pesar por lo ocurrido.


Atraídos por la curiosidad, muchos se acercaron a verlo. Varios lo reconocieron: era el troyano Persias y había luchado con ellos hasta el final. Debió unirse a alguno de los grupos que, como ellos, consiguieron huir. Al despertar el herido, Cirene le sonrió y lo llamó por su nombre. Él hizo un gesto de rechazo.

Me llamo Náufrago, ya te lo dije – respondió.

Iba a replicar Cirene, cuando se produjo un alboroto. Un grupo de soldados armados con escudos, lanzas y espadas, y unos cuantos arqueros, se presentaron en la playa procedentes del bosque. Eneas alzó ambos brazos, dando a entender que no llevaba armas, y se acercó a ellos. Los trabajos se detuvieron en el campamento y la playa quedó sumida en un profundo silencio. Después de intercambiar unas palabras con quien parecía el jefe de los soldados, Eneas se volvió hacia los suyos.

- Cirene, coge a mi hijo y ven conmigo. Acates, Palinuro, venid también. Y tú, Icarus, quedas a cargo de todo. Acelera cuanto puedas la reparación de las naves y el acopio de víveres y agua, por si hemos de partir de inmediato. Estamos en las tierras del rey de los feacios. No parecen hostiles, pero no podré asegurarlo hasta hablar con él.

----

----

- ¡Nausícaa, Nausícaaaaa …!

- Entonces, ¿conocías al Náufrago? – preguntó Ascanio a una niña de edad parecida a la suya aunque más alta que él. Llevaba el cabello recogido en dos trenzas, anudado en la parte superior de la cabeza y prendido con unas flores blancas. Tenía la tez morena y los ojos grandes. – ¿Y conoces también a la ninfa?


- Nunca la he visto. Pero le he llevado ofrendas muchas veces. Casi siempre hojas y flores. Como éstas – dijo la niña señalando su propia cabeza.

- ¡Nausícaaaaa…! – siguió sonando su nombre a través del jardín del palacio.

- Vuelve locos a los hombres. Por ser tan bella – prosiguió Nausícaa sin responder a la llamada. – Aquí nadie se acerca a su estanque.

- ¿Y tú sí? – preguntó con admiración Ascanio.

- Yo no tengo miedo. Ni de las divinidades ni de los hombres – y muy dignamente, se levantó del tronco donde estaban sentados y cogió de la mano a Ascanio para entrar juntos en el palacio de su padre.

----

----
El rey de los feacios era una persona piadosa y compasiva y, conociendo la destrucción de Troya por boca del propio Eneas, se brindó a socorrerlo. Acogió al anciano Anquises en su palacio para que gozase de comodidad y durante varios días sus hombres ayudaron a los troyanos a reparar las naves y les facilitaron herramientas, toneles para el agua y cuanto necesitaban para su travesía.

Durante ese tiempo, el Náufrago se fue recuperando. La herida no era grave y el contacto con seres humanos suavizó su aspereza de los primeros días. Le contó a Cirene que viajaba en una nave con algunos de sus parientes y, por las noches, antes de ser vencido por el sueño solía mirar la luna reflejada en el mar. Había una muchacha en Troya con la que hubiera deseado casarse y seguramente habría muerto en el asalto a la ciudad. Sentía una gran tristeza. Una noche llamó su atención un brillo inusual en el agua y, al fijarse, vio muy cerca de la superficie un rostro impreciso pero muy hermoso: unos ojos color de esmeralda, una tenue sonrisa y cabellos largos y relucientes como hilos de oro que oscilaban y cambiaban sus contornos con el movimiento de las ondas. Durante varias noches seguidas no pudo dejar de mirar a esa criatura hasta que al fin, cuando estaban navegando frente a estas costas, tendió hacia él sus manos y muy lentamente le hizo gestos para que la siguiera. Y él, sin dudarlo, se arrojó al mar.

Supo luego por los habitantes de este lugar, que la ninfa Sao moraba en el manantial y tenía por costumbre salir al mar a buscar amantes. Desde entonces se quedó en el bosquecillo de alisos y sobrevivió alimentándose de hierbas y raíces. No podía alejarse de ella, necesitaba verla de nuevo y escuchar su voz. Algunas noches se metía en el estanque para tratar de sentirla a su lado. Pero ella sólo se dejaba ver de vez en cuando, y por un breve instante. Y fue precisamente un destello dorado en el agua lo que le llevó a precipitarse hacia el manantial la tarde que Iskias lo hirió.
Cirene se dio cuenta de que el Náufrago miraba cada vez más a Iskias. No estaba enojado con ella ni le reprochaba el haberlo atacado. La observaba limpiar y afilar sus flechas, tensar la cuerda de su arco y caminar con paso elástico hacia el bosque. Cada vez que ella agitaba su larguísimo cabello o se lo peinaba, el Náufrago sonreía como un niño. Una vez, creyendo no ser visto, acarició las ropas de la amazona que se estaban secando junto al fuego.

- Creo que el Náufrago va a cambiar la ninfa marina por otra de carne y hueso – dijo riéndose un día Icarus, mientras se decidía en qué nave le harían un hueco para llevarlo consigo. Sería en la de Eneas.

----
----

Apenas estuvo todo preparado, Eneas decidió partir y ofreció al rey un banquete en la playa. Ardieron los fuegos por la tarde, comieron en abundancia y se estrecharon vínculos de amistad entre feacios y troyanos. A éstos les aguardaba un largo viaje hasta las costas del Lacio y numerosas penalidades y peligros. Aunque entonces todos lo ignoraban, también al griego Odiseo lo arrojarían las olas aquí y sería Nausícaa, la hija del rey que no temía a nadie, la primera en socorrerlo.

Con el amanecer se echaron las naves al agua y al cabo de unas horas quedó la playa desierta. El mar estaba calmo y azul, un suave viento hinchaba las velas y saltaban peces plateados alrededor de las embarcaciones. La amazona Iskias y Cirene iban sentadas a popa con los ojos cerrados y los rostros levantados en dirección al sol. Gozaban de un rato de inactividad, después de tantos días de trabajo. Habían hablado mucho, en ese tiempo, de sus vidas y también del Náufrago. Un hombre extraño. No le habían permitido acercarse al manantial y, pese a que había opuesto alguna resistencia, había embarcarlo con ellas. De pronto, el suave chapoteo de los remos quedó oculto por un ruido mayor y el agua les salpicó la cara y el cuerpo.

- ¡Hombre al agua! – gritaron varios remeros.

El Náufrago emergió sobre las olas y, al instante siguiente, Iskias se lanzó trás él.


* y **Detalles de relieves. Museo de las Termas de Diocleciano.
***, ***** y *******Ribera del Tíber.
****Escultura de una niña. Museos Capitolinos.
******Relieve masculino. Museo de las Termas de Diocleciano.
********Detalle de escultura femenina. Museos Capitolinos.
*********Olocau. Valencia

NOTA: Algunos amigos participan de esta historia con diversos personajes. Para facilitar la comprensión de cada post, se incluye la lista por orden alfabético de personajes. A continuación, entre paréntesis, están los nombres de los amigos bloggeros.
ACATES, amigo del alma de Eneas. (Eggy)
ACUS, hijo mayor del príncipe del Senado y Jefe de la expedición de Dido. (Acus)
AEMILIUS, director de las obras de la muralla de Cartago. (Unjubilado)
AMILCAR, timonel de la nave de Dido. (Edem)
AMNERIS, la tejedora. (Paula)
ANARKASIS, actor. (Anarkasis)
ANNA, hermana de la reina Dido. (Bethania)
ANQUISES, padre de Eneas. (Juan)
ASCANIO, hijo de Eneas. (Ferípula)
BARCE, nodriza de Siqueo, doncella y confidente de Dido. (Leodegundia)
CAIUS PERTINAX, un hombre de negocios. (Joaquín)
CALIBÁN, un personaje enigmático. (Gonzalo)
CARMINIS, pintora de éxito. (Carmen)
CIRENE, la viajera troyana, madre del poeta Trailo. (Lady Read)
CLAUDIO APOLLIONI , esclavo y pedagogo. (Juanmb)
CLOANTO, un troyano. (Rafael p.q.)
COPA DE ORO del padre de la reina Dido. (Tony)
CRISEA, una vestal. (Krisish)
CUPIDO , dios del amor, hijo de la diosa Venus y hermano de Eneas. (Lady Ice)
DADA, un personaje de oriente. (Ixchel)
DIANA, esposa de Acus y amiga de Dido. (Claullitriche)
DINCER, una bailarina oriental. (Ximena)
DEMETRIUS PEDER, un escultor griego. (Pru)
EL TIEMPO, el viento y el agua. (Manuel)
EOLO, dios de los vientos. (Gloria de Un cajón revuelto)
ESPÍRITU invisible, protector de la nave de Dido. (Cieloazzul)
FILÓN, un filósofo cínico. (Gregorio Luri)
GABRIEL, vigía de navío de la reina Dido.(Iralow)
ICARUS, lugarteniente y consejero de Eneas. (Javier)
IGRES, Un cartógrafo mestizo. (Sergi Bellver)
IRIS, mensajera de los dioses. (Fortunata)
ISKIAS , amazona, guardaespaldas de Dido y Anna. (Lady Zurikat)
JACINTA, artesana de vasijas de arcilla. (Ontokita)
JEFA DE COCINA del palacio de la reina Dido en Cartago. (Charo Marco)
JUNO, diosa esposa de Júpiter y protectora de Dido.(Gabu)
KARO, escribiente de la señora Imilce. (Antonio Portela)
KOSTAS, cordelero amigo de Imilce. (Kostas h.)
MERCURIO, mensajero de los dioses. (Marelyt)
MOOK, perro de la reina Dido. (Movie)
MORGANA, una hechicera siria. (Morgana)
NÁUFRAGO, náufrago enamoradizo. (Tinta del corazón)
NAUSICAA, hija del rey de los feacios. (Nausicaa)
NEOPTOLEMO, hijo de Aquiles. (Aquiles)
NEPTUNO, dios de los mares. ( Antonia Romero)
NISMACIL, guerrera oriental. (Aurefaire)
PALEMON, comerciante griego con productos de oriente. (Adrià Urpì)
PALINURO, piloto de la nave de Eneas. (Luis Rivera)
PAREPIDEMOS SAMOSATENSE, peregrino. (Charles de Batz)
PITONISA de un oráculo. (Badanita)
PRINCIPE DEL SENADO, Jefe del Senado de Tiro y luego de Cartago. (Angelusa)
SALMA, Esclava oriental. (Gloria de Ojos de miel)
SAO, una ninfa. (Irene)
SEÑORA IMILCE, impulsora, narradora y corazón de esta historia. (Almena)
SERVULO, joven esclavo, copero de la reina Dido. (Felipe Servulo)
SIQUEO , sacerdote de Melqart y esposo de Dido. (Pedro (glup))
SIRIO, gato de Anna. (Sirio)
TEANO, matemática muy reputada. (Miriam g.)
TRAILO, poeta troyano e hijo de Cirene la viajera, narrador de parte de esta historia. (Grimalkin el bardo)
ULA, amiga de Dido. (Ula)
UN ARBOL un tanto especial. (Goathemala)
UN CANGREJO en cualquier playa. (Cangrejo sedentario)
UN GRAN MATORRALaromático a la entrada de una cueva. (Rosa Silverio)
UN MALO, malísimo. (El hippie viejo)
UTYKE, sobrina del sacerdote de Hércules. (Nina)
VENUS, diosa del amor, madre de Cupido y Eneas. (Elisa de Cremona)
XILÓN, maestro griego, cronista de la familia de la reina Dido. (Fernando Sarriá)
YARBAS, rey pretendiente de Dido. (Kurtz)
ZOE, prostituta con vocación de libertad. (Zoe favole)

68 comentarios:

  1. Los tiempos se cruzan, asì como tambièn los amores surgidos de una herida curada en una playa. Tendrà Iskias la fuerza para rescatar al Naùfrago o, èste, volviò a buscar la seducciòn de la ninfa Sao? Preguntas sin respuestas hasta la pròxima entrega. Abrazos, amiga.

    ResponderEliminar
  2. Anónimo8:07 p. m.

    Un abrazo, Isabel. El fragmento me ha recordado otro, La voz perdida, de Pascal Quignard, no por el argumento, sino por ser tan mágico y tan acuático como éste...

    ResponderEliminar
  3. Isabel Romana, escribes rematadamente bien. Y te odio porque no me puedo desenganchar de tus relatos.
    Quizá la ninfa no se quede en el manantial y les acompañe durante el viaje, aunque..., pobre náufrago, lo que debe de estar sufriendo.
    Un abrazo amiga.

    ResponderEliminar
  4. Anónimo11:06 p. m.

    Muy buen relato. Y como dicen por ahí arriba, yo también estoy enganchado. Muy enganchado. Sigue así.
    Besos.

    ResponderEliminar
  5. uffff el cabello dorado de las ninfas... qué peligro se cierne
    creo
    a no ser que la amazona...
    hummm
    :)

    beso!

    ResponderEliminar
  6. Me disculpo por la demora, parece que no solo con las embarcaciones llego tarde, ando lento para comentar también.
    Como sea, me alegro de haberlos finalmente encontrado, sin dudas la generosidad del rey de los feacios y su pueblo han sido fundamentales para que nuestra travesía siga. Veremos qué nos depara el destino, pero no puedo dejar de pensar en el Náufrago, ¿qué se trae entre manos?. Supongo que tú te encargarás de develarlo.
    Besos!!
    Acates.

    ResponderEliminar
  7. No encuentro el comentario que te dejé en el capítulo anterior.
    Es posible que suceda con tu blog lo mismo que con el mío, que se tarda bastante en actualizar las novedades.
    De todos modos, siempre son halagos, como no puede ser de otra manera.
    Esta historia me maravilla y ahora me has dejado más prendada y prendida que nunca...

    ResponderEliminar
  8. Anónimo4:44 a. m.

    Hombre a bordo de una certera patada acuatica en el trasero! va a ser el proximo grito. Mi hermana nadaba nuy bien, habia hecho el curso de salvamento, pero ya dije, tiene pocas pulgas, muy pocas. En un caso asi, lo sube de un buen golpe.
    Porque la gente 've' cosas en las que cree? antes ninfas que recordaran al ser amado, luego virgenes y santos y ahora ovnis?

    ResponderEliminar
  9. Desde que supe de tu proyecto me ha interesado mas leer tu blog.

    ResponderEliminar
  10. Anónimo5:25 a. m.

    Magnífica pluma, Isabel. No sabía que había una lista de aportantes. No entendí la mecánica. Pero no importa. El resulta es, como siempre, fabuloso. Abrazo.

    ResponderEliminar
  11. Anónimo12:56 p. m.

    Me apasiona la historia, estoy deseando leer el siguiente capítulo, ¡que impaciente soy!.
    Soy una viajera muy intrepida.

    Me encanta como escribes Isabel.

    Un beso.

    Cirene.

    P.D: como ves me oriento mejor en la vida de ficción que en la real.

    ResponderEliminar
  12. Me hubiera gustado haber conocido a la ninfa del estanque... y dejarme enloquecer como el Náufrago.

    Muy bonito, diosa, un beso,
    Icarus.

    ResponderEliminar
  13. El mar sigue nuestros designios...ahora todos estamos en tus manos...besos capitana..

    ResponderEliminar
  14. Buen texto isabel...estoy apuntando a mis glosarios algunos de los términos que citas aqui, buen material para otras composiciones...
    besos desde temuko, chile.

    ResponderEliminar
  15. Queridos amigos: estoy desesperada. He cambiado la plantilla para ver si podía mejorar algunas cosas (como poner etiquetas, etc.) y resulta que no me aclaro con la nueva: no tengo forma de poner algunos banners que ya tenía, el contador y, además, sale el texto muy apelotonado, no me gusta nada ni encuentro el modo de arreglarlo. ¿Alguno de vosotros me puede ayudar? ¡Sed caritativos...!

    ResponderEliminar
  16. Hola fgiucich, en esta historia se entrecruzan otras, eso está claro. Ahora bien, si el Náufrago conseguirá desligarse o no de la ninfa Sao o si Iskias logrará ayudarlo en esa tarea, está por ver... Besotes.

    Hola gabriela, comparaciones como la que haces me llena de satisfacción aun cuando me parezca un tanto inmerecida. Pero sí, me hace falta un poco de ánimo, más ahora que llevo lío con la plantilla nueva y estoy disgustada y desanimada. Besos, querida amiga.

    Hola acus, sólo hay que darse un paseo por la blogosfera para ver la cantidad de náufragos sufrientes que nos rodean. Y no me odies por estar enganchado, que estos enganches no dañan la salud y, en cambio, nos proporcionan ratos de alegría. Besitos, guapo.

    Hola kurtz, creo que engancharnos a historias que nos remiten a nuestras raíces está bien. ¡Ni se te ocurra desengancharte...! Besos.

    ResponderEliminar
  17. Hola almena, creo que irene - perdón, la ninfa Sao - es uno de los grandes peligros de los mares. Siempren nos atrae hacia las honduras y la perdición... Besitos.

    Hola eggy, no llegas tarde a nada, está bien que cada uno reme a su ritmo. Veremos qué ocurre con todos estos personajes. Besitos.

    Hola diana l. caffaratti, yo tampoco sé lo que pasa, estoy hecha un lío con esta nueva versión y nueva plantilla y pierdo el tiempo inutilmente... En fin, me alegro que haya llegado este comentario tuyo. Gracias por animarte a seguir esta historia. Besitos.

    No creas, lady ice, que aún se siguen viendo santos... Y sí, tienes toda la razón, vemos aquellos que deseamos ver muchas veces, nos engañan los sentidos y, sobre todo, nos pueden a veces los sentimientos. Besitos, guapa.

    ResponderEliminar
  18. Anónimo7:58 p. m.

    No creo ser de gran ayuda con lo de la plantilla pero inténtalo con otras a ver si te gustan más, pues hay muchas. Lo del contador se pierde a no ser que vuelvas a la plantilla original y retomes donde se quedó.
    Hoy he estado frente al mar y he seguido nuestra historía, me ha venido a la mente tal vez porque vivo cerca de donde se produjeron estos hechos.
    Eneas va acercándose cada vez más. Quiero saber de él en estas tierras ya alejadas de Troya. Tendré paciencia, ya vendrá el tiempo.

    ResponderEliminar
  19. Hola leo zelada grajeda, gracias por seguir el avance del blog. Espero mantener el pulso. Besos.

    Hola julio suárez anturi, se trata nada más que de un juego de imaginación. Muchos amigos se han animado a identificarse con un personaje concreto: algunos de ellos estaban ya en la historia, otros los han inventado con el nombre y la actividad que querían desarrollar ficticiamente. Mi compromiso es meter a todos esos personajes en esta histora. ¡Ya veremos cómo...! Es también, una forma de conocerse y conectar unos con otros. Habrá que esperar al resultado de esta experiencia. Besos, querido amigo.

    Hola lady read, el olfato para orientarse se mantiene en la ficción y en la realidad. Otra cosa es que a veces uno se pierda un poquitín... Besos, querida amiga.

    ResponderEliminar
  20. Javier, es imposible que Icarus se deje seducir por una ninfa, porque entonces Eneas estaría perdido... debes mantener tus emociones bajo control, como está mandado en un buen troyano que dará lugar a un buen romano. Pero siempre te quedará la imaginación... Besitos de consuelo.

    Hola fernando, yo diría que seguimos estando en manos de los dioses y sus deseos, tan alejados, a veces, de nuestras necesidades... Besos.

    Saludos wenuan, celebro que le saques utilidad inmediata a esta historia. Es un placer recibirte en esta casa en la que, espero, te sientas como en la tuya. Saludos cordiales.

    Saludos, ula, soy tan torpe en estos manejos de la plantilla y todo eso, que no veo por dónde seguir. No creo que pueda recuperar la plantilla original... En cuanto a tu proximidad con los lugares en que tuvieron lugar estos hechos, ten por seguro que te envidio... Besos, querida y afortunada amiga.

    ResponderEliminar
  21. Isabel:
    Deseo, siendo un poco egoísta, que arregles cuanto antes el asunto de la plantilla y que emplees tu tiempo en la historia.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  22. No te puedo ayudar, Isabel Romana, como mucho te puedo decir que hables con Gem@ (está en mis links) y que entiende mucho sobre esto. Coméntaselo a ver qué te dice.

    P.D: Me gusta odiarte por tenerme enganchado a tu pluma, porque consigues con tus palabras, que te admire.

    ResponderEliminar
  23. Isabel, sigo leyendo esta obra que cada día me gusta más, la plantilla bueno te digo que por mozilla me sale mejor, sigo peleando con beta pero allí voy
    Lo que te dice Acus es cierto ella te puede explicar y ayudar

    gem@

    ResponderEliminar
  24. Esto de leer dos relatos seguidos me pongo más impaciente por saber más....dejas a uno picada.
    De acuerdo, espero. Pero chica, es que estoy intrigada.
    Cuando te leo, me pongo a pensar o imaginarte como vas construyendo la historia y dándole vida a tantos personajes.

    En cuanto al blog, la que me ha sacado de apuros es Rosa Silverio.
    Pero ese detalle de que se queda el texto pegado en las letras, no lo hemos podido solucionar.
    ¿Quieres que le diga o tú le escribes a su correo? me avisas.

    Besos amiga...

    ResponderEliminar
  25. la playa da para mucho...
    demasiado a veces...

    además, vengo a contarte que estás "etiquetada" en mi blog.

    Ven a mi blog!!

    un besazo querida

    ResponderEliminar
  26. TIENE MUCHA MAGIA EL RELATO ISA .
    TE ADMIRO COMO MANEJAS LA HISTORIA Y SUS PERSONAJES .
    VIENE BIEN MI AMIGO EL NAÚFRAGO O.....
    SIGO CONECTADO

    ResponderEliminar
  27. ufff amiga!!!!!
    pero como haces para atrapar intensamente en cada relato!!!
    no sabes que placer me da leerte...y es que conforme leo me hago tan familiar a los personajes... casi puedo mirarlos!!!
    sigo en la ruta...
    mil besos admirados!!

    ResponderEliminar
  28. Ya! Me puse rápidamente al dia con esta tremenda historia! Tendré que repetirlo una vez más: narradora ídola! Está buenisima la historia!!!

    (Que bueno encontrarme con otros viajeros errantes)

    besos y gracias

    Ximena

    ResponderEliminar
  29. Holaaaaa!!!!! mmm este naufrago se tiró!!!! no se si para llamar la atencion de Iskias o porque vio a Sao... como cuesta esperar el proximo capitulo amiga!!!!!!!
    Besitos de hada!!!!

    ResponderEliminar
  30. Anónimo8:05 a. m.

    Seguiré pendiente de tu magnífico relato ya que me tiene enganchado.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  31. Me transportas, como siempre... Este es un periplo que no deseo ver finalizar...

    Me siento un poco náufrago...y a pesar de ello, quiero volver al mar...

    Un abrazo, Isabel.

    ResponderEliminar
  32. Anónimo12:56 p. m.

    Bueno, he vuelto para ponerme al dia con la historia.Parece que a veces uno está ahi con los protagonistas, escondido en alguna parte del barco o cualquier otro lugar.
    Cordiales saludos.

    ResponderEliminar
  33. ¿Con cual de las dos se quedará el Naúfrago? ¿Con la ninfa Sao o con la bella humana? ¿Perecerá en el agua o le rescatará Iskias? Estaremos esperando la próxima entrega como locos/as jejeje
    Besos

    ResponderEliminar
  34. UY, me perdi un monton de capitulos, como hago para leerlos. Par colmo se me rompio la impresora.

    Pero igual paso a saludarte y desearte que tengas una buena semana, yo hasta hace poco no las tuve, pero ya esta, paso.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  35. Las ninfas de los rios....ay ,que bonitos y evocadores recuerdos,encontre una una vez y casi me cuesta la cordura ,pero que bien tañia la lira y que dorados eran sus cabellos....

    ResponderEliminar
  36. Anónimo7:46 p. m.

    Impresionas con tu relato y con cada uno de tus personajes he historias,mis felicitaciones.

    Es un privilegio el poder comentar en tan grande espacio.

    Excelente

    ResponderEliminar
  37. Querida Isabel, cuando digo cerca de donde ocurrieron estos hechos, me refiero al mediterráneo sur español. Para mí son las mismas aguas. Tal vez exagero porque tu tambien vives cerca de ellas.

    ResponderEliminar
  38. Hola felipe sérvulo, finalmente me he rendido y he vuelto a la plantilla antigua. Estoy tan anticuada como la señora Imilce, por lo menos. Besos.

    Hola acus, visitaré a gemma, porque hay cosas de la plantilla nueva que me interesan (otras me horrorizan...) Gracias.

    Hola alida, trataré de seguir tu consejo de consultar a gemmma.

    Hola clarice baricco, gracias por tu interés. He regresado a la plantilla antigua y pienso que, más adelante, procuraré informarme mejor y volveré. El texto apelotonado me agobia mucho. Besos, guapísima.

    ResponderEliminar
  39. Hola elisa de cremona, ya he visto que me has "etiquetado". Para cumplir tu "pase" y no trastocar ni desvirtuar la orientación de este blog, si te parece y no tienes inconveniente, replicaré en el próximo post dentro del primer comentario. ¿Te vale así? Es que no veo manera de meterlo aquí, en medio de una historia... Besos, guapa.

    Hola hippie viejo, ya ves cómo va el pobre Náufrago... Te recuerdo que te elegiste ser un personaje malísimo, y aún estoy pensando en éllo... Besos y feliz semana, amigo.

    Hola cieloazzul, hacer sentir a los personajes próximos y humanos es lo que más me apetece conseguir. La vida, nuestras vidas, están llenas de emociones. Besos, guapa.

    ResponderEliminar
  40. Hola ximena, sé que es un gran esfuerzo ponerse al día, porque a medida que avanza la historia, es más pesado leer tantos posts. Pero vaya, está bien pasar un rato en compañía de tantos personajes de cuyas vidas sólo sabemos un poquito... Besos y hasta pronto.

    Hola aurefaire, las ninfas ejercen una fascinación muy poderosa, pero también tiene poder la carne... Ya reencontraremos más adelante a estos personajes. Besos, hadita.

    Saludos, unjubilado, ¿creías que todo iba a ser venir, levantar la muralla y cobrar...? Nada de eso, hay que estar al pie del relato... Besos, guapo.

    Hola lágrima del guadiana, creo que todos nosotros llevamos algún náufrago en nuestro interior. Y, al fin y al cabo, el náufrago es quien se agarra con uñas y dientes a una isla, por pequeña que sea, para sobrevivir. Besitos.

    ResponderEliminar
  41. Las imágenes son increíbles las palabras muy buenas,,,te sigo

    ResponderEliminar
  42. Hola rafael pq, es que tenemos el privilegio de estar ahí, con estos personajes, compartiendo con ellos... Besos y hasta pronto.

    Hola irene, ¡No mientas...! ¡Lo que estás esperando es pillar a otro amante, el que sea...! Le has cogido gusto a eso de tener a tu lado un adorador... Besitos, seductora.

    Hola máximo ballester, celebro que haya pasado la mala racha. En cuanto a la historia, pues no te preocupes. Ya la irás leyendo poco a poco si te apetece y si no, ya vendrán tiempos mejores... Besos.

    Hola aquiles, tu que conoces la capacidad de seducción de las ninfas das testimonio de cuán difícil es sustraerse a ella... No hay nada más atrayente que aquello que no se puede poseer. Besos.

    ResponderEliminar
  43. Hola alexis coald, me alegro que te gusten los personajes. ¡Quién les iba a decir a ellos que en poco menos de tres mil años andarían bloggueando...! Besitos.

    Saludos ula, creo que el Mediterráneo es el mar más hermoso en historias que conozco. Y sí, coincido contigo en que son las mismas aguas... Besitos, guapa.

    ResponderEliminar
  44. Saludos, mi despertar, ahora que estás aquí espero que permanezcas y te sientas como en tu propia casa. Ya ves que hay muchas "plumas" conocidas... Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  45. Tu larga historia de Dido y Eneas me resulta tan atrayente que la voy a imprimir para leerla con mas comodidad y tranquilidad. Creo que deberias publicarla y que no te faltará editor.
    Además está llena de notas aclaratorias muy prácticas para no perder el hilo de la narracion.
    Enhorabuena

    ResponderEliminar
  46. Nausícaa, la hija del rey ...no tiene miedos, porque es niña o por su jerarquía???

    Ascanio tampoco.
    Es interesante ver como ella lo lleva de la manito a él....Mujeres de Roma, al fin y al cabo?

    Me encantó la alegría del texto...ese despojarse de los harapos, de los rangos, de las armas...de la playa, para seguir camino.

    Ese náufrago se ama a sí mismo? O traerá problemas????

    No hay un poco de locura? :)
    Besos de mármol esculpido, Reina Isabel.

    ResponderEliminar
  47. Seguí toda la escena desde la playa, al lado de los niños... Mi cuerpo, estuvo presto a saltar en el momento en que aparecieron los soldados, tal y como bien lo sabe Imilce... Me alegró que todo volviera a la calma y se alejara el peligro de un nuevo y angustioso combate.
    Claro lo tuve casi desde el primer momento que Iskias..., como gran amazona que es, no dejará que nadie naufrague, ni siquiera un hombre..., además un hombre enamorado de una ninfa.

    ResponderEliminar
  48. Me encantan tus relatos. Me tienes en ascuas!!

    Besos

    ResponderEliminar
  49. Isabel, cuál de todos tus relatos es el que más te gusta?

    te sigo amiga...te sigo...casi como una telenovela...

    ResponderEliminar
  50. Resulta poético experimentar la estrecha vinculación que hay en tu historia entre mortales y divinidades. Como los segundo interactuan con los primeros, e incluso obligan a que sus vidas den giros inesperados en función de las circunstancias.

    Pienso que así debían de verse en la antiguedad clásica, y así de próximas debían sentir a sus divinidades. Entonces la pregunta es obvia: ¿creían en el destino, en el libre albedrío, o se consideraban juguetes cautivos de la voluntad de sus propios dioses?.

    Salud

    ResponderEliminar
  51. Anónimo1:37 p. m.

    Espero que Iskias lo salve y entre ellos surja una historia de amor.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  52. Anónimo3:54 p. m.

    no hagas caso a trini y pon una buena ración de seso,
    ....conviértelos en juguetes cautivos como dice Charles,
    de sus pasiones

    - ahora, vais a hacer lo yo os diga
    ji ji ji ji

    (e una broma)

    ResponderEliminar
  53. ISA,perdón , no estuve el fin de semana y hoy lunes me encuentro con un regalo tan especial, todo un capítulo al náufrago.
    Me encantó, ni que me conocieras....
    UN beso ,un abrazo y muchisimas gracias.

    ResponderEliminar
  54. Anónimo4:37 p. m.

    Iskias se está convirtiendo en mi heroína.
    Un beso Isabel.

    ResponderEliminar
  55. Saludos al, la verdad es que resulta un poco complicado evitar que los lectores se pierdan en una historia contada de manera tan fraccionada... Me alegro que se pueda seguir razonablemente bien. Y me parece estupendo que la leas toda seguida, más agradable seguramente que ir a trompicones... Gracias por tu visita y saludos cordiales.

    Hola ferípula, yo creo que Nausícaa no tiene miedo porque la valentía es una cualidad suya. De hecho, cuando en la Odisea se cuenta cómo llega a sus playas Odiseo, todas sus doncellas huyen, menos ella... En cuanto a la locura del Náufrago, no sé qué decirte, querida amiga. ¿No fue más loca todavía la guerra de Troya? Besitos, Ascania.

    Hola kostas kamaki, deseo que vivamos esta historia muy de cerca. En ella nos reconocemos... Besos y no naufragues tú.

    Hola athos, sabes que tienes un compinche en Sirio, el gato de Anna, la hermana adolescente de la reina Dido. Con los ojos y la inteligencia felina seguro que no os perdéis nada... Saludos cordiales.

    ResponderEliminar
  56. Hola lis, no es una pregunta fácil de responder. Creo que cada relato tiene un interés particular y yo tiendo a identificarme con todos los personajes. ¡Adoro a todas las mujeres romanas y no romanas, porque ellas nos han traído hasta aquí...! Besos y hasta pronto.

    Hola charles de batz, trato de reproducir, en relación con los dioses, lo que nos ha transmitido la literatura de la antigüedad. Supongo que algunos creían en los dioses más que otros, pero en cualquier caso me parece que percibían la divinidad como seres a los que convenía agradar y aplacar, muchos males eran castigo por haber sido impíos. Quizá muchos griegos creían en un destino inexorable. No así otros pueblos. En cualquier caso, en estas épocas arcaicas, no cabía pensar en una relación directa de cada persona con la divinidad, sino de la colectividad con la divinidad. La impiedad de uno contaminaba al conjunto... De todos modos, también a mí me parece que esa relación estrecha entre hombres y dioses resulta poética y reveladora. Besos, querido amigo.

    Hola trini, no me extraña para nada tus deseos, puesto que toda tú exhalas amor. Ya veremos lo que pasa... Besitos, guapa.

    Hola anarkasis,los griegos inventaron la racionalidad y, al mismo tiempo, la tragedia. Debió ser tremendo... Besotes.

    Hola tinta del corazón, no hay más que leer tus posts para conocer tu vocación de náufrago eterno...Ahora tienes a todo el mundo en vilo. Besos, querido amigo.

    Hola gloria, no me extraña que veas en Iskias una heroína. Tiene fuerza y determinación. Besos y hasta pronto.

    ResponderEliminar
  57. Enganchado a tus letras. me despido expectante.
    Un abrazo desde el Trópico.

    ResponderEliminar
  58. posees una batidora de almas y océanos.

    así vas uniendo nuestros espíritus, nuestras visines culturales.

    ResponderEliminar
  59. Que bellahistoria la de Iskias y el naufrago
    Ya me tienes atrapada...
    Un beso

    ResponderEliminar
  60. ...querida Isabel... paso nada más a dejarte un beso... poco tiempo y dos capítulos de retraso me tienen lejos... pero ya me pongo al día!...

    ResponderEliminar
  61. Hola Isabel se nota que volviste a la version vieja, porque mi comentario no quedo. No importa! Me encanto igual,como siempre, y nos trasnportas en el tiempo hasta sentir la roca, el arroyo, y la gente. Te decia que si es por mi el naufrago puede ahogarse tranquilo: mas de 5 segundos bajo el agua no aguanto, y ni recuerdos de como era eso de nadar. Menos de sostener a una persona, trabarle los brazos y remolcarla a patada limpia y menos sumergirte debajo de ella para empujarla e izarla a bordo. Se ve que la infeccion ya se hace sentir, maldicion! Mejor me quedo nadando en el Mediterraneo en la ficcion. Es mas saludable.

    ResponderEliminar
  62. Es un meme y no sé si te animarás... por si acaso
    Juego propuesto: Me lo propuso Aurefaire y consiste en escribir 5 líneas de la página 123 del libro que estés leyendo. Después, pasárselo a cinco blogueros y avisar.
    Puedes verlo en mi blog
    Besos romanos

    ResponderEliminar
  63. He perdido un poco pie porque he estado trabajando mucho, pero ya me pongo al día.
    Os echaba de menos

    ResponderEliminar
  64. ¡Ay, el enamoramiento...!

    Como siemnpre. Romana, exquisita manera de relatar la tuya.
    Sigo con el otro capítulo, que he estado malita.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  65. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  66. Hola heriberto, saludos hacia el trópico... Besazos.

    Hola gonzalo, ojalá fuera cierto lo que dices... me gustaría fundir al mundo entero en una sola alma, aunque sin suprimir lo que nos hace diferentes y, por ello, ricos. Besos.

    Hola fortunata, hasta en los momentos más difíciles - o quizá en los momentos más difíciles - los seres humanos nos hacemos más humanos aún. Besitos.

    Hola claullitriche, comprendo muy bien que no es fácil mantenerse siempre al día. Tenemos tantas obligaciones y tanto que hacer, que es casi imposible. Tómalo con calma, al ritmo que puedas... Besitos.

    ResponderEliminar
  67. Hola lady zurikat, lamento que se perdiera tu comentario al volver a la antigua versión. Me he sentido tan torpe y tan perdida, que me pareció que sería la solución menos traumática para mí. No me dí cuento de esto de los comentarios... Una de las cosas buenas que tenemos los humanos es esa capacidad de imaginar y de sentirnos felices imaginando. Así que húndete en ese mar ficticio de donde proceden tantas hermosas ficciones, y disfruta de él. También los demás disfrutamos viéndote lanzarte tras el naúfrago, cualquiera que sea el resultado de tu esfuerzo. Besos, querida amiga.

    Hola mª antonia moreno, atiendo a tu invitación y lo pondré en un comentario del próximo post. Más que nada para no cambiar el sentido de este blog ni despistar al personal. Besos y gracias, guapa.

    Hola antonia romero, felicidades por haberte quitado de encima todo ese trabajo y estar ya de regreso... Besitos.

    Hola angelusa, espero que ya estés recuperada por completo. Besos y hasta pronto.

    ResponderEliminar