¡Decídme, piedras; hablad, oh excelsos palacios!
¡Una palabra, calles! Genio, ¿no te conmueves?
¡Sí, todo tiene alma entre tus sacras murallas,
eterna Roma! Sólo para mí calla todo.
Oh, ¿quién me susurrará, en qué ventana veré
a la dulce criatura que me aliviará al abrasarme?
¿No presiento aún los caminos por los que día tras día
en ir y venir a su casa sacrifique el tiempo precioso?
Aún contemplo palacios, iglesias, ruinas, columnas,
como el prudente que el viaje aprovecha juicioso.
¡Pero esto pasará pronto! ¡Luego será un solo templo,
el templo de Amor, el que dé su amparo al devoto!
Eres un mundo, sí, Roma, pero sin amor
ni el mundo sería el mundo, ni Roma tampoco Roma.
GOETHE.- “Elegías romanas”.
¡Una palabra, calles! Genio, ¿no te conmueves?
¡Sí, todo tiene alma entre tus sacras murallas,
eterna Roma! Sólo para mí calla todo.
Oh, ¿quién me susurrará, en qué ventana veré
a la dulce criatura que me aliviará al abrasarme?
¿No presiento aún los caminos por los que día tras día
en ir y venir a su casa sacrifique el tiempo precioso?
Aún contemplo palacios, iglesias, ruinas, columnas,
como el prudente que el viaje aprovecha juicioso.
¡Pero esto pasará pronto! ¡Luego será un solo templo,
el templo de Amor, el que dé su amparo al devoto!
Eres un mundo, sí, Roma, pero sin amor
ni el mundo sería el mundo, ni Roma tampoco Roma.
GOETHE.- “Elegías romanas”.
Traducción de Jesús Munárriz.
NOTA: Queridos amigos, aquí os dejo los enlaces a diversas reseñas sobre la novela “Dido reina de Cartago”, recientemente aparecidos. Agradezco a sus autores su interés y gentileza.
Insula Litterae,
Ad libitum
Mis pensamientos 2.0
*El poeta Goethe, con el fondo de la Vía Apia y el sepulcro de Cecilia Metela, pintado por Tischben. Foto tomada de wikipedia.
**Vista de Roma desde el Gianicolo. Foto de Rafa Lillo.
El amor es importante en cualquier parte, pero ciertamente, Roma, Paría o Lisboa no se conciben sin amor.
ResponderEliminarSabes, amiga, que en Cordoba se identificó un mausolero de base circular y se reconstruyó... Ahora su aspecto es muy similar de la tumba de Cecilia Metela...
ResponderEliminarPor otro lado, es cosa sabida ROMA no es sino AMOR al reves...
Un abrazo, amiga
Leí "Werther" de muy, muy joven. Fue uno de los libros que me enseñó que había algo más allá de "Los cinco"
ResponderEliminarMaravilla.
Un saludo
Ciertos los versos de Goethe, yo me quedé prendada de él tras leer Las desventuras del joven Werther, es todo pasión.
ResponderEliminarun abrazo
Muy duro pasear por Roma sin tener un amor. Más duro aún si la ciudad fuera Venecia. En este tema parece que hay ciudades más propicias que otras.
ResponderEliminarUn saludo.
Sin el amor no es posible Roma, no es nada posible. Pero anoche, leyendo a Gibons, me preguntaba por esa forma de amor que nace del instinto de posesión y que, sobre la destrucción de lo poseído, busca crear un mundo nuevo. Eso fue Roma también. Esa fue, en el fondo, la auténtica Roma. No lo digo para su desdoro, sino desde el reconocimiento de la realidad del hombre. Porque ¿acaso invalida la belleza de Keofs los 30.000 esclavos que murieron para construirla?
ResponderEliminarNInguna ciudad sería nada sin amor.
ResponderEliminarUn abrazo
Al igual que con las mujeres, Goethe ama a quien no puede amarle, Roma sólo ama a los romanos.
ResponderEliminarUn abrazo
pues AMOR y ROMA son una misma cosa..
ResponderEliminary por eso Roma fue la luz del mundo...
besos miles querida amiga
Imposible visitarlos y leerte como corresponde.
ResponderEliminarIntente ver tu entrevista pero no pude verla entera....
Se te extraña. Ironias de la vida
Siempre nos das y compartes belleza...aún en la ausencia del amor, o de roma ;)
ResponderEliminarBikiños muchos mi querida Isabel.
Tenía una amiga-"se fue muy pronto"-que visitó Roma y cuando me contaba de esa ciudad mágica y eterna se emocionaba muchísimo...la recordé con mucho cariño al leerte Isabel.
ResponderEliminarDeseo tengas una hermosa semana!
besos
Adal
...Yo, lo amaré...
ResponderEliminarme recordaron estas palabras suyas, sensaciones antiguas..., y esa forma de exaltación, me trajo también a la memoria a mi Hiperión..., y a mi Diotima. Digo "mi" porque forman parte de mi y los adoro.(Para quien no lo sepa, personjes del escritor F.Hölderlin).
Siempre dejándonos cosas hermosas.
Un fuerte abrazo.
Qué entrada más bella. Un abrazo
ResponderEliminarUn Goethe apasionado, perdido entre tanta belleza romana, con la vista agotada y el corazón solitario...Roma para los romanos, no es verdad, Roma para siempre y para todos y todas. Busca al amor en Roma, no desesperes poeta, más tenacidad que lo encuentras cerca de una fuente, al lado del Coliseo, en la Apia...¿no la ves? Roma te quiere.
ResponderEliminarGracias romana y sensible Isabel por estas palabras bellas. !Ave! y un bsito abuelita feliz.
Goethe, Roma y el amor. ¿Quien se resiste?
ResponderEliminarCombinación de bellezas, siempre da un resultado excelso.
Un fuerte abrazo, tocaya.
que bella eres cuando piensas en Roma.
ResponderEliminarRoma y Goethe: ¡qué maravillosa simbiosis!Tuve ocasión de visitar la casa donde se alojó en su estancia alli,en la via Condotti,si no me equivoco, y que justamente exponía en esos días sus dibujos y pinturas (acuarelas y aguadas), delicados y bellos como sus poemas.
ResponderEliminarSaludos, Isabel!
Me fascina GOETHE pero gracias a vos amiga me entero de que le escribiò a la bella ROMA...
ResponderEliminarP.D.:Igualmente se hace dificultoso imaginar una ROMA sin el AMOR como leit motiv... :)
♣ MIS BESITOS ENORMES ISA ♣
a ves, un verdad ancestral exresada desdeel principio de los tiempos de la expresión humana. El amor lo más importante, ni Roa, ni Valencia, ni Barcelona, ni... no sonnada sin él.
ResponderEliminarUn abrazo,
Isabel
Sigo tu blog,me gusta
Yo creo que todas las ciudades están escritas con amor. Y creo que visitando Roma, cualquiera se enamora de ella.
ResponderEliminarLeo esos artículos sonbre tu libro y aquí me tienes asintiendo con la cabeza...Jajajaja!
Cuánto me alegro. Tu libro es precioso de principio a fin!
Un beso
Lala
Roma cantada por un genio. Abrazos.
ResponderEliminarPD Siguen los éxitos, amiga mía. Cuánto me alegro.
Estupendo Isabel Goethe y sus Elegias a Roma.
ResponderEliminarEstoy con Dido y es una maravilla, me encanta, le estoy dedicando los pocos momentos libres que tengo.
Enhorabuena por este estupendo libro.
Bicos
Amiga Isabel,
ResponderEliminarHaces muy bien en traernos aquí este precioso poema de Goethe, poema que da vida a todo lo que de la Aeterna Roma nos queda. En él todo cobra vida. Esas ruinas son como un mundo animado en el que lo muerto y caduco cobra nueva vitalidad. Esta visión viva de lo inerte me recuerda al Ovidio de Las Metamorfosis, el que nos presenta con vida a todo lo que nos rodea. Hasta las piedras son residuos de vida en esa obra que tanto admiro.
Y, para finalizar, esa resonancia nostálgica de Lucrecio, que, en el Proemio de su De rerum natura (Sobre la Realidad en traducción de Agustín García Calvo), nos presenta al Amor, representado por la diosa Venus, como el motor que lo pone todo en marcha.
Toda una delicia de poema.
Te envío un beso cariñoso,
Antonio
pomposo, uff
ResponderEliminarAdoro las palabras finales de Goethe, un gesto que reconoce la grandeza de Roma, pero le recuerda que "algo" está por encima de ella, ese necesario Amor...Vaya Amiga, los Poetas ponen las cosas en su lugar!
ResponderEliminarUn fuerte Abrazo Isa Querida!
Isabel, también amor a la lectura denotan las tres reseñas que he leído sobre tu novela y que amablemente has compartido. No tengo la menor duda de que la difícil facilidad que tienes para reconstruir sensación y tiempo navegaran en Dido.
ResponderEliminarEscribir sin amor es también negar a Roma.
Abrazos lectores.
Sergio Astorga
mmm qué cierto el poema
ResponderEliminarel amor cambia toda visión de cada cosa.
Besos mil
Isabel, me encantaría que entraras en mi correo de gmail y me dejaras tu dirección postal, para enviarte el libro de Mariel. También me gustaría me dieras permiso para hacer, desdemi barra lateral un enlace a tu blog con el libro como fotografía (voy a hacer una especie de escaparate con los libros que publicais los blogueros)
ResponderEliminarHola Isabel, siento no haberme pasado por aquí antes pero con el viaje a India y la puesta en marcha de nuestra empresita (este sábado tenemos conferencia) no he tenido tiempo. Ahora a ponerse las pilas.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué bien refleja Goethe los sentimientos que te ahogan al contemplar las ruinas de la grandiosa Roma.
ResponderEliminarTus ojos resvalan la mirada sobre las superficie rota de un un pedazo de marmol colosal, mientras un haz de luz se filtra entre las nubes que oculta al cielo los restos del Foro. Las voces que la inundaban en otro tiempo han desaparecido, pero aún se escuchan sus murmullos, retazos sueltos del eco del sonido. Los ojos huecos de un togado miran mudos al futuro conociendo el pasado y el futuro de la civilización humana.
Es un gigante dormido, roto en mil pedazos dispersos por Europa, pero con el corazón, la sangre y las ideas aún vivas en nosotros, su legado.
Un besazo Isabel
Roma, Italia entera, me evoca muchos sentimientos, pero no es el amor uno de ellos.
ResponderEliminarRoma, la poderosa, la cruel conquistadora, la cuna del nuevo arte, el ara de la política, la estratega, la ingeniera ...
¿Quién no lo alamará, querida ISabel?. No he estado en Roma. No pasé de Florencia y sé que Roma me enamorará. Más. Y Goethe.
ResponderEliminarGracias por tanta belleza,
Hola paisana, excelente texto
ResponderEliminary bonita la imagen,
un placer pasar por tu casa
feliz semana
un abrazo.
Bellísimo texto de Goethe con una frase final inolvidable:"Eres un mundo, sí, Roma, pero sin amor ni el mundo sería el mundo, ni Roma tampoco Roma." Me ha encantado, querida Isabel y agradecer tus visistas y decirte que el domingo me voy a Atenas, que las culturas clásicas nos tiran a las dos. Un beso fuerte, querida amiga.
ResponderEliminarNunca he visitado Roma,familiares y maigos que sí lo hicieron me hablan reflejando en prosa el mismo sentimiento poético de Goethe...Mi única experiencia,que ya para mí es especial,ha sido viajar en el espacio y en el tiempo en las ruinas romanas de Mérida,en mi tierra...y asistir al genial Festival de Teatro que allí se organiza...y ciertamente,sea en prosa o en poesía,Roma te penetra...aun no estando realmente en ella,y sí estándolo,claro...ya que hubo un tiempo que Roma estuvo en nosotros.
ResponderEliminarEn breve tendré tu libro en las manos!!viene de camino...
Achuchones!!
Excelente pregunta la de Goethe a las piedras...
ResponderEliminarUn abrazo amiga...
Existirà la posibilidad de que tu libro llegue a Colombia?
Querida Isabel:
ResponderEliminarUna Muy Querida Amiga -que compartimos Vos y yo- es también mi "Ángel Guardián" y en estos momentos está en España.
Sin decir palabra, pero sabiendo (como todo ángel)cuánto quiero "ese" libro, ha comprado "Dido, Reina de Cartago"...y me lo envía a Argentina!!
Quería compartir con Vos la alegría, dentro de unos días, tus bellas letras estarán en mis manos!
Un fuerte Abrazo Querida Isa!
Ya estás en mi barra lateral y desde Dido se accede a este blog.
ResponderEliminarSi no te parece bien, dímelo.
¡Qué descubrimeinto encontrar tu blog! LLeno de poesía si me lo permites me quedaré a disfrutarlo ¡muchas gracias! Un abrazo
ResponderEliminarY es que Roma siempre inspira. Besos, guapa.
ResponderEliminarDe los más hermosos versos de Goethe.
ResponderEliminarQue frase...sin amor el mundo, no seria mundo.
Goethe es de mis poetas favoritos, desde que lei Werther lo sigo.
Saludos!
No conocía tu blog. Encantado del encuentro. Felicidades.
ResponderEliminarAh, las palabras de Goethe resuenan por el universo, así como el amor crea el mundo.
ResponderEliminarSí, Goethe, tú nos conmueves siempre en tus palabras llenas de sentimiento y pasión profundos.
Una elegía maravillosa, como roma merece.
Un besazo, querida amiga.
Impresionante Goéthe, como siempre, (es uno de mis admirados mas exclusivos.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte Isabbel.
Me enamoré de Goethe cuando leí "Poesía y verdad", a Roma no la olvido desde que pisé sus calles.
ResponderEliminarBella reseña , dulce compañera.
M.
Pd Ya mismo le pido Dido reina de Cartago(ardo de ansiedad) a mi hermano que camina por Paris por estos días.
Por la imagen que has dejado, parece que el autor muestra su nostalgia por el pasado de Roma. Yo diría que para Goethe, como para todo gran filósofo, nada tenía que ver su nostalgia con el sentimentalismo de que todo tiempo pasado fue mejor, sino con aquella idea de concordia que Roma representó.
ResponderEliminarTe felicito por las reseñas de tu libro. También me gustó mucho oír la entrevista que te hicieron en la radio. Sin duda todo es merecido, pues has hecho un trabajo duro.
Un abrazo
Núria http://dmiventana.blogspot.com/
Siempre me impactó Goethe.
ResponderEliminarBesos preciosa.
Es cierto... ni el Mundo sería el mundo...
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