“Cuando queden a abril seis días, la estación de la primavera se hallará a mitad de su curso (…). Ese día, volviendo yo de Nomento a Roma, me encontré con una multitud vestida de blanco en medio del camino. Un flamen iba hacia el bosque del viejo Tizón para ofrecer a las llamas las entrañas de un perro y las entrañas de una oveja. Al instante me acerqué para enterarme de la ceremonia; tu flamen, Quirino, pronunció estas palabras: “Tizón inmundo, respeta las plantas de Ceres, y que su tallo ligero se cimbree en la superficie de la tierra. Deja tú crecer los sembrados, fertilizados por los astros propicios del cielo, hasta que vengan en sazón para las hoces. (…) aparta tus manos tiñosas de las cosechas y no dañes los cultivos: ya es bastante que tengas poder para dañarlos. No abraces los tiernos trigales, sino al duro hierro: destruye antes lo que puede destruir a otros. Más útil será que asaltes las espadas y las armas que hacen daño; ninguna necesidad hay de ellas; (…) Que la dejadez enmohezca las armas y, si alguien intenta desenvainar la espada, note que queda frenada mucho tiempo. “
OVIDIO.- “Fastos”
Traducción de Bartolomé Segura Ramos.
NOTA 1: El 25 de abril se celebraba la fiesta en honor a Robigo (Tizón), que protegía los cereales de una enfermedad producida por un hongo que los destruía. Pedía Ovidio que, en lugar de atacar a las plantas, atacara las armas y las oxidara. Ahora que estamos todos con la vista puesta en la crisis, no está de más recordar que sigue habiendo conflictos bélicos y sigue muriendo gente por las guerras y por sus secuelas.
NOTA 2: El próximo domingo 29 de abril, estaré en la Feria del Libro de Valencia firmando ejemplares de mi novela, a partir de las 19 horas, en las casetas 20 - 21 - 22. ¡Por si alguien se anima a venir!
No sé si podré acercarme, pero te deseo que acabes con la mano bien cansada de firmar muchos ejemplares.
ResponderEliminarBesitos
Ja, ja, ely, qué más quisiera yo, quedarme con la mano rota... Besos, guapa.
ResponderEliminarPor mí, claro que iba, pero ya sabes lo lejos que me queda.
ResponderEliminarBesos y mucho éxito.
Pues eso, lo que dice Elysa, que al final del día tengas la mano cansada de tanto firmar. Mucho éxito.
ResponderEliminarBicos
No puedo enviarte mi acebo, le quiero demasiado, pero si quieres fotos de sus flores y frutos, te las envio.
Allí estaré, Isabel (DM)¡y te haré propaganda...!
ResponderEliminarQue tengas mucha suerte.
Besos, Carmen Sabater.
Cierto, con los propios problemas olvidamos que siguen habiendo guerras, hambrunas y otros males.
ResponderEliminarNo está mal recordarlo.
Vaya, a firmar libros! Qué bonito.
Espero que te falten ejemplares ;)
Un beso
Isabel mucha suerte y que firmes muchos libros, me gustaría acercarme, pero no creo que pueda. Bss.
ResponderEliminarMucho éxito en Valencia. El libro y tú se lo merecen.
ResponderEliminarUn saludo.
Ovidio siempre certero: en vez de atacar las provisiones y los cereales, que se ataque a las armas. Mucha suerte en Valencia. Abrazos, Isabel.
ResponderEliminarParafraseando los versos que dan nombre a mi blog te diré:
ResponderEliminarSoñé que el fuego me helaba,
soñé que la nieve ardía
y, por soñar lo imposible,
soñé que la guerra no existía.
Mucha suerte con esa firma y, para los dolores de la muñeca (que estoy seguro llegarán) usa Reflex.
Un fuerte abrazo Isabel.
Isabel:
ResponderEliminarQuieran los dioses que se enrobinen todas las armas.
Seguro que te irá bien en la feria.
Vale.
Una delicia...gracias por compartir Isabel!!
ResponderEliminarMil besos.
Isabel, me ha gustado mucho esta entrada. La he rebotado en mis cuentas de la red. El domingo iré a visitarte a la Feria. D.
ResponderEliminar¡Qué lejos me queda Valencia! Suerte, amiga.
ResponderEliminarSi me mandan el pasaje y me aseguran que su deplorable servicio de control de migraciones (ver lo que sucede con los africanos para boton de muestra) no me devuelve al segundo, de mil amores estaria en le feria.
ResponderEliminarEn cuanto al pedido de Ovidio lastima que nadie le dio bolilla hasta hoy.
Si me mandan el pasaje y me aseguran que su deplorable servicio de control de migraciones (ver lo que sucede con los africanos para boton de muestra) no me devuelve al segundo, de mil amores estaria en le feria.
ResponderEliminarEn cuanto al pedido de Ovidio lastima que nadie le dio bolilla hasta hoy.
Mando ahora el texto de Ovidio al embajador de Estados Unidos en Madrid, por si tiene a bien influir en el Presidente Obama, pasivo y feliz observador de cómo se acribillaba a bin Laden, un criminal sin escrúpulos, pero un ser humano que merecía un juicio justo.
ResponderEliminarEl anterior he sido yo (Guereñu) lo que pasa es que no salí de otro blog en el que participo. Perdón.
ResponderEliminarQue buena publicación, todo un gusto visitarte.
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