Tu amor no me importa, Febe. Te veo coquetear con ese presumido de Fíbulo junto al ninfeo de Egeria y me doy cuenta de que tus andares son horribles y tus pies enormes. ¡Quieran los dioses que ahora mismo te tropieces y te caigas de cabeza dentro del estanque dejando tu culo fuera! Me sentiré muy a gusto viendo como Fíbulo y toda Roma se carcajean de ti.
* Ninfeo de Egeria, en el valle della Caffarella, entre la vía Appia y la vía Latina. Roma.** Agua en una fuente romana.
NOTA :Queridos amigos, os comunico que en Kala Editorial han colgado mi relato “La decisión de la reina”. Podéis leerla
y, si os gusta, otorgarle vuestro voto. El botón para votar está en la parte superior de la página, antes de que empieze el texto.
amores+contrariados, enfado
amores+contrariados, enfado
"Estaba una zorra con mucha hambre, y al ver colgando de una parra unos deliciosos racimos de uvas, quiso atraparlos con su boca.
ResponderEliminarMas no pudiendo alcanzarlos, se alejó diciéndose:
- ¡Ni me agradan, están tan verdes...!"
(Esopo)
Al no poderla tener para él solo, le encuentra todos los defectos posibles...
Como siempre encantadores, relato y fotos!!!!
Besitos IsaBELLA!
Mi enhorabuena, Isabe. Breve, entretenido y con un regusto indiscutible a los clásicos. Besos, amiga.
ResponderEliminarDeberá haber sido un culo muy mal visto, seguramente. Abrazos.
ResponderEliminarJeje, tan cierto como que la juventud siempre ha sido igual. Las mismas rabietas, en escenarios distintos. Besos.
ResponderEliminarEl despecho tiene milenios entre los mortales... y las palabras que destila, son cargadas por el odio generado por tanta frustración.
ResponderEliminarMuy divertido lo escrito del día de hoy, Isabel!!!
jajajaja mato la istoria!!!!!!!
ResponderEliminaresta buenisima!!!!!!!!
jajaja
besitos a colores amiga!!!!!!!!!!
ops no salio la H en Historia jajaja
ResponderEliminary ya q estamos mas besos
Amor y juventud:
ResponderEliminarMenuda mezcla...
Besos.
Un relato muy del siglo XXI Isabel...
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo cierto es que es muy bueno...
ResponderEliminarUn abrazo
Jajajaajajajajajajaj
ResponderEliminarMil perdones amiga mìa si me rìo pero esa actitud absoluta y vìsceralmente despechada me ha dejado pasmada!!! oO
P.D.:Quien pudiera la mayorìa de las veces decir lo que siente sin medir consecuencias,eh?!
¿Serà un derecho de la juventud?
jajajajajajaja
TE DEJO UN MONTÒN DE BESAZOS :=)
Jajajajajajajá!!!!
ResponderEliminarAh, mi amiga! Las pasiones de este mundo no reconocen épocas!
Me encantó esta postal de celos y amor,tan romanas, tan humanas!
Festejo tu fantástico humor!
Besote y Abrazote para Vos!
Maravilloso breviario!!!
ResponderEliminarY quizás vamos a coincidir, para el amor, los celos no hay edad, todos somos adolescentes.
Te quiero mi bella Isabel, y con vos disfruto de los avatares de LA ROMA.
MaLena.
Este "Despecho Juvenil" tiene un delicioso aroma a aquellos epigramas que tan populares hicieron el malévolo de Cáluto y Marcial, y que encierran en sí mismos un ritmo y una musicalidad perfecta.
ResponderEliminarEs curioso, pero no recuerdo dónde leí un interesante artículo en el que se establecía un paralelismo entre este género y el de los Haikus.
He leído "La decisión de la Reina" y, por supuesto, he dejado mi voto.
Salud
jajajaajajaj
ResponderEliminartoda Roma y yo
jajajajajaja
qué despecho
(tu relato, fantástico)
ISABEL,HAS ENTRADO EN MI BLOG Y TE DOY LAS GRACIAS, AHORA LO HAGO AL TUYO, LA VERDAD QUE ME PARECE INTERESANTE, LO IRE MIRANDO Y ENTRARE EN EL QUE TU ME INDICAS, TE MANDO UN SALUDO. SEFA
ResponderEliminarEl despecho de mil canciones, historias, lagrimas y poemas se mantiene vivo a traves de los siglos, sin edad, y a veces hasta nos hace reir...como en tu divertido relato!
ResponderEliminarHola Isabel!
jejej ese despecho, nos hace ridículos hasta en nuestros deseos.
ResponderEliminarAhora mismo voy a leer tu relato, mi enhorabuena (lo que no entiendo es como no te publican más).
Bszsss
Hola selma, qué oportuna la fábula de la zorra y las uvas. Creo que este adolescente está tan rabiosillo que sobre todo desea ofender... Besitos, guapa.
ResponderEliminarSaludos, m@riel, celebro que le encuentres ese cierto regusto a los clásicos. Ya sabes cuánto me gustan... Besitos.
Hola fgiucich, no sé por qué, me huelo que este muchacho no ha visto para nada ese culito. Besos.
Cierto, isabel, estas rabietas son universales y, según parece, eternas. Besitos.
ResponderEliminarHola la candorosa, me alegra que hayas encontrado divertido este texto. Creo que en esta época necesito un poquito de humor. Besos.
Hola aurefaire, te aseguro que mucha gente también desearía ver los traseros de las hadas... Besitos, guapa.
Bueno kurtz, tu estás metido de lleno en esa mezcla... Besos enormes.
ResponderEliminarHola cornelivs, gracias por considerar tan actuales estas tontadas. Besitos.
Hola mª antonia moreno, no estoy tan segura de que sea bueno. Me conformo con que se pueda leer con agrado. Besitos.
Hola gabu, eso de decir sin empachos lo que se piensa creo que es un privilegio de la juventud pero, sobre todo, de la vejez. No conozco un solo abuelito/abuelita que no diga directamente lo que le pasa por la cabeza... También nosotras llegaremos a eso un día ¡y lo que nos divertiremos! Besotes, querida amiga.
ResponderEliminarHola susana, los romanos no eran celosos. Pero sí les hería el amor propio, sobre todo cuando eran jóvenes, el ver que una chica miraba con mejor disposición a otro. Es más bien una cuestión de rivalidad masculina... Besitos.
Hola maLena, supongo que es cierto que a veces los adultos nos comportamos como jovencillos sin experiencia en esto del amor. Pero claro, ¡es tan difícil ser siempre serio, responsable, adulto...! Un abrazo enorme, querida porteña.
lindas fotos!
ResponderEliminarbuen relato y como bien apuntan cuando no puedes poseer algo le sacas los defectos,como haciendolo de menos,asi es el ser humano..
ResponderEliminarun beso
Enhorabuena por tu relato, mejor beber la cicuta que entregarse al enemigo siempre, he leido tu relato y me ha gustado como siempre tambien tu post de los celos y el despecho eso no cambia
ResponderEliminarayyyyyyy jajajajaaa
ResponderEliminarque las rabietas del despechado no cambian con los siglos...
:)
(acabo de votar tu relato)
Besos!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarUna clara muestra de desaprobación.
ResponderEliminarBesos de Roma
Jajajajaj, cuánto me ha gustado esta entrada. Eso sí que se llama despecho, amiga mía.
ResponderEliminarCuántos no hemos reaccionado así ante un desplante.
Amiga, voy a pasar por Kala Editorial a leer tu relato. Gracias por mantenernos al tanto de tus pasos.
Abrazos,
Ro
Saludos, charles de batz, es una asociación muy curiosa esa de los poemas breves de Catulo y Marcial con los haikus. Por mi parte, y aun sin estar muy puesta en la materia, diría que los haikus suelen ser muy líricos y nada humorísticos.Gracias por leer y votar a la reina Sofonisba. Besotes.
ResponderEliminarHola pilar m clares, confieso que me hubiera gustado presenciar esa caída. Besitos, guapa.
Muchas gracias por tu visita sefa, espero que nos veamos más. Saludos cordiales.
Amiga tictac, te echaba de menos. Supongo que los enfados y las bromas han llegado hasta nosotros a través de miles de generaciones y no parece que nos vayamos a cansar... Besitos.
ResponderEliminarHola andaya, muchas gracias por ir a leer mi relato. Espero que te haya gustado. Besos.
Hola rrrrrriane, gracias por tu visita. También tú te ves muy linda. Saludos cordiales.
ResponderEliminarHola esther, cierto que podemos "consolarnos" inventándonos o subrayando defectos de los demás cuando así nos conviene. Este jovencito estaba muy enfadado, ya se ve. Saludos cordiales.
Hola ribemependros, gracias por leer el relato en Kala. Soy de tu misma opinión, es muy importante la dignidad a la hora de morir. Saludos cordiales.
Hola almena, los jóvenes siempre resultan jóvenes en cualquier siglo. Besitos, guapa.
ResponderEliminarHola without, desaprobación sí, pero también fastidio. Este niño está "escocío..." Besos.
Hola rosa silverio, creo que uno se siente más aliviado si puede pensar que le puede pasar alguna barbaridad a quien nos ha ofendido. Vamos, que se fastidie él también. Gracias por leer mi relato en Kala. Besos, querida amiga.
ayyyyyyyy qué feo!
ResponderEliminarAhora sí te pasaste, jajaja..
Bueno como siempre.
Abrazos..
Vaya... escrito corto pero con cierto toque de chispa eh? jeje!
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