Estela funeraria hallada junto a la tumba de la reina Dido, cerca de la puerta sur de la antigua muralla de Cartago:
“Decid, mares y estrellas, si hubo en el mundo un timonel que superase en sabiduría y bondad al noble Amílcar. Dinos, luna, si tus rayos han alumbrado alguna vez los pasos de un felino tan leal como lo fue el gato Sirio. Y tú, sol radiante, nombra, si puedes, a un amigo más devoto y sincero que Mook, el perro inseparable de su dueña. Quede aquí memoria eterna de la nobleza de los tres, pues cada cual, desde su propia naturaleza, amó y sirvió a la reina Dido de Cartago con todo su corazón. Esta inscripción mandó tallar, entre lágrimas, la noble Anna, hermana de la reina”.
“Decid, mares y estrellas, si hubo en el mundo un timonel que superase en sabiduría y bondad al noble Amílcar. Dinos, luna, si tus rayos han alumbrado alguna vez los pasos de un felino tan leal como lo fue el gato Sirio. Y tú, sol radiante, nombra, si puedes, a un amigo más devoto y sincero que Mook, el perro inseparable de su dueña. Quede aquí memoria eterna de la nobleza de los tres, pues cada cual, desde su propia naturaleza, amó y sirvió a la reina Dido de Cartago con todo su corazón. Esta inscripción mandó tallar, entre lágrimas, la noble Anna, hermana de la reina”.
NOTA: Sirva esta estela imaginaria como testimonio de afecto y agradecimiento a aquellos amigos que participaron como personajes en la novela Dido reina de Cartago y nos han dejado: Edem (Enrique de Jesús Mier Monforte) que fue Amílcar, timonel de la nave de la reina; el gato Sirio, con el mismo nombre en la novela, compañero inestimable de Anna y, el último en marcharse, el perrito Movie que dio vida a Mook, el perro de la reina. Para ellos, de todo corazón, recuerdo y gratitud eterna.
NOTA 2: Queridos amigos, en breve retomo la actividad ordinaria del blog. Os visito en cuanto pueda. Besos.
Una preciosa manera de honrar las ausencias. Descanse en paz todos, recuerdo bien a Movie de nuestra común amiga.
ResponderEliminarUn abrazo.
Saludos, Isabel. Todos estamos esperando la continuación de tu novela. Y paz para los ausentes.
ResponderEliminarBesos
Una estela preciosa. Me uno a tu sentimiento.
ResponderEliminarUn abrazo de bienvenida.
Espero con impaciencia las bellas palabras e imágenes que nos traerás, Isabel.
ResponderEliminarEsta estela y el texto son preciosos.
Un fuerte abrazo.
Muchas gracias, Isabel por tanta belleza. No sé si el síndrome de Standhal tendrá que cambiar de ubicación
ResponderEliminarD.
Preciosa forma de recordar y agradecer, Isabel.
ResponderEliminarBien venida.
Qué sensibilidad la de Anna !!
ResponderEliminarQuerida Isabel estaré en Roma la semana que viene y espero inspirarme para mi papel de Tarpeya.
Un besazo
Precioso recuerdo para los ausentes que están presentes...
ResponderEliminarBonitas palabras para el reencuentro y para continuar con la fundación de Roma.
Estamos expectantes.
Besos veraniegos para ti, Isabel.
Ya nunca más estarán ausentes querida Isabel. Un besote
ResponderEliminarFeliz reencuentro, infelices ausencias. Somos humo.
ResponderEliminarHermosa manera de recordar a los ausentes.
ResponderEliminarMe alegra mucho volver a leerte, Isabel.
Besitos
Preciosas las palabras dedicadas a los que nos dejaron.
ResponderEliminarMe alegro de que estés de vuelta, pues mi destino depende de mi narradora y aquí ando, al cuidado de los innobles Amulio y Criseida, sin saber cómo acabará esta aventura.
Miles de besos, querida amiga.
¡Madre mía!, cuánta cultura y bien hacer hay en esta casa. ¿De dónde voy a sacar el tiempo para ponerme al día? Iré poco a poco, entre otras cosas porque necesito venir y aprender.
ResponderEliminarUn afectuoso saludo y hasta pronto.
Sentido homenaje, sin duda. Feliz regreso, yo también estoy de vuelta.
ResponderEliminarTe estamos esperando ansiosamente!!! :)
ResponderEliminarUn placer mi querida Isabel volver a leerte, se te espera con ansia!
ResponderEliminarAbrazos.
Debido, merecido y muy hermoso.
ResponderEliminarY que Caronte haya sido especialmente benévolo con Amílcar, pues ambos saben de embarcaciones y de llegar a buen puerto.
Un abrazo de vuelta, escritora guapa. Yo empiezo ahora mis vacaciones.
Precioso homenaje. Que aunque no estén estan, por que ya lo dijo Cicerón, que La vida de los muertos perdura en la memoria de los vivos.
ResponderEliminarUn abrazo!
Bien retornada Dido, ayyyy, Isabel. Delicadísimo relieve, exquisito para expresar la muerte.
ResponderEliminarHomenaje a ti también autora de esa novela maravillosa, y a todos y todas los que ofrecieron su granito de arena.
La fidelidad y el cariño de los dulces felinos o los perros, siempre perdura en nuestra memoria, !que la tierra les sea leve!
No tardes amiga que nos dejaste en suspenso, voto a !Marte! Besito.
Esperamos la continuación de la historia y que Amulio y su pérfida esposa no se vayan de rositas.
ResponderEliminarUn saludo.
Que palabras tan sentidas,colmadas de afecto y sincero respeto...
ResponderEliminarP.D.:Por lo visto andamos todos un poco retirados de la vida bloggeril,aún así espero tu pronto regreso!!!
BESITOS ANSIOSO AMIGA :)
Esperándote estaba, he de entrar en acción pronto y me he preparado a fondo para cumplir mi delicada misión.
ResponderEliminarCon el recuerdo a los que ya no están, una tierna manera de regresar.
Besos y alegría por leerte.
Bienvenida ahora y siempre Querida Isabel! Un agradecimiento tan bello para los amigos que participaron en Dido, como para los que saludamos tu regreso.
ResponderEliminarUn fuerte Abrazo Amiga!
Anudados tus manos y sus patas, la luz de Sirio sigue brillando; estoy segura que deben estar junto con Moovie ademas de jugueteando de lo lindo, dandote nuevas ideas para tu nueva novela donde sin duda, algun perro y algun gato daran que hablar. Con 21 felinos años bien vividos, hasta donde la vida me dejo cuide de el todo lo que pude y lo mejor que pude, llegando hasta inyectarlo; se ve que como dices, noble como pocos, el gato lo reconocio porque horas antes de su partida, vino en mi busqueda y pidio expresamente echarse en mi regazo para ser mimado como un rey, como si supiera que llegada la hora, no podria sostener sus patitas de este lado hasta que alguien se las tomara y le dijera 'ven' del otro.
ResponderEliminarLa vida pasa rapido para perros, gatos y humanos, demasiado rapido para perder tiempo en odios....
Amiga, un abrazo fuerte... Espero que estes descansando y reponiendote
ResponderEliminarMadame, aquí seguimos, aunque aún sin poder estar tan presente como antes. Pero no arrojamos la toalla ni renunciamos a aquello por lo que vale la pena seguir asomándose a estas ventanas.
ResponderEliminarEn definitiva, aguardo su regreso.
Buenas noches
Bisous
Mis làgrimas agradecidas.
ResponderEliminar¿que se puede decir de la partida de una persona? Pues en mi caso, lo mismo que con Sirio pues nunca hice diferencias entre los miembros de mi familia por cantidad de patas. No obstante, ello no me ciega al dolor de aquellos que perdieron a un ser querido: hijo, padre, hermano.
ResponderEliminar¿Es diferente el dolor? No lo creo, es el mismo, solo varia la intenisad segun quien lo sienta.
Gracias por tan bella lectura. Me alegra tu retorno.Beso.
ResponderEliminarEl regreso del verano parece que nos ha traído consigo tristezas y alegrías. La Parca ha hecho de las suyas y la Fortuna nos ha permitido tu retorno.
ResponderEliminarAbrazos
Gracias a todos/as, queridísimos amigos. Sé que ha sido una manera un poquito triste de retornar, pero la vida nos trae penas y alegrías cuando ella quiere y a nosotros no nos queda más que aceptarlas. En breve estaré con vosotros. Un abrazo muy fuerte y gracias por vuestra cálida bienvenida.
ResponderEliminarSolo los bobos pierden voluntariamente la memoria.
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