¡Oh,
Venus Verticordia, invoco tu protección el día en que las romanas te celebramos!
Quisieron los padres de la Patria instaurar tu culto para que las vírgenes y
las matronas, lejos de dejarnos llevar por el desenfreno, nos mantuviéramos dentro
de los límites del pudor y la conducta conveniente. Protégenos pues de esas
pasiones.
Y
protégenos de las pasiones de otros. Por ejemplo: no dejes que la ambición de
poder y de dinero, tan extendida y amplia como todo el territorio romano,
reduzca a la miseria a las ancianas, a las niñas, a las viudas, a las mujeres
desamparadas en general.
Y
te lo pido a ti, madre Venus, a falta de otra divinidad a la que suplicarle. Los
padres de la Patria, tan diligentes a la hora de proteger nuestra virtud, se
olvidaron de algo mucho más importante: instaurar el culto a un dios que ponga
freno a la peor y más destructiva de las pasiones, a la cual ellos están expuestos cada día: aprovecharse del más débil para medrar.
* Venus Esquilina, en los Museos Capitolinos, Roma. Foto de: Paco Hernández.
NOTA 1: El día 1 de abril se
celebraba la fiesta de Venus Verticordia “aquella que sobrecoge los corazones”
o que los “recoge”. El culto a esta diosa fue instaurado por el Senado después de terminar
la guerra contra Aníbal, al parecer para frenar la cierta vida licenciosa de
las mujeres. En el 114 a.C., se aumentaron los honores concedidos a la diosa
levantándole un templo, cuyo emplazamiento se desconoce, y que fue consagrado
el día 1 de abril.
NOTA 2: Queridos amigos,
disculpad que no haya puesto los dos últimos capítulos de la primera parte de
Remo y Rómulo, por motivos ajenos a mi voluntad. Sigo trabajando en la
preparación de la segunda parte, así que confío en volver a la normalidad en
breve y seguir adelante con la novela. Gracias por vuestra comprensión.
Ay, madame, creo que Venus está sorda, puesto que desde entonces aún no ha escuchado nuestros ruegos. Son tantas las reducidas a la miseria por la ambición de poder y dinero!
ResponderEliminarBueno, yo me alegro egoístamente de que aún no haya podido ofrecer la continuación de la historia, puesto que así he podido ponerme ya al día.
Buenas noches, madame
Bisous
Es curioso instaurar esta fiesta para frenar la vida lujuriosa de las mujeres, invocando nada más y nada menos que a la diosa del amor, de la belleza y del pudor.
ResponderEliminarEspero que se solucionen los problemas que te ha impedido continuar la historia de Rómulo y Remo. Un fuerte abrazo, Isabel.
Espero poder leerte prontito y que todo se solucione.
ResponderEliminarLas mujeres siempre las que estan bajo control y a ellos quien los controla;))
Un abrazo inmenso Isabel.
Querida Isabel, estas piezas breves hacen que la espera sea más llevadera. Espero que todo vaya bien. Un abrazo grande
ResponderEliminarCreo que ni con todas las invocaciones dejarán de medrar los corruptos. Pero elevémoslas y, sobre todo, pensemos soluciones efectivas que cuando "las barbas de tu vecino..." (Chipre).
ResponderEliminarUn abrazo con todo mi cariño y no te apures, Isabel. A veces queremos concluir y no podemos por circunstancias ajenas a nosotras mismas. Por supuesto, toda nuestra comprensión y apoyo.
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ResponderEliminarPues ni Venus ni deidad alguna ha escuchado jamas esta suplica y ni por lo visto va a escucharla (y con el argento en Roma, menos, pues tiene una misoginia que da miedo)
ResponderEliminarCuriosidad: a Cibeles se la entronizó en Roma cuando las sibilas predijeron que, si así se hacía, Aníbal sería derrotado.
ResponderEliminarBesos, querida Isabel.
Machismo de ayer y de hoy. La mujer ha de estar siempre alerta ante las maniobras que se realizan sin su consentimiento ni participación.
ResponderEliminarUn saludo.
Ayy Venus, tú que también sentiste pasiones, nos comprendes, que hay pasiones necesarias en las mujeres como en los hombres, si aquellos a los que tú amaste.
ResponderEliminarDe entre las diosas bella Venus, no valen tus poderes contra la infamia sedienta del poder que nos insulta y nos enerva ¿ tendremos que acudir a Minerva? Tampoco creo que valga.
Amiga, te comprendo, tómate tu tiempo que esperamos la segunda parte con mucho interés pero sin prisas. Acabo de regresar de Albión y he subido fotos, algunas más subiré de tema romano, !qué frío en la muralla de Adriano! muchedumbres en el British, pero alguna foto hice. Besitos muchos.
Qué nos guarden, que tanta falta nos hace.
ResponderEliminarAbrazos, querida mía.
¿Será Venus suficiente protección?
ResponderEliminarBesos.
Hola la dame masquée, sí la diosa Venus parece estar sorda, pero la verdad es que hace siglos que dejamos de acogernos a su protección. Si no respetamos ni lo humano ni lo divino, difícilmente podremos conseguir ningún apoyo... Beso su mano, madame.
ResponderEliminarHola paco hidalgo, las deidades de la antigüedad tenían, como después las cristianas, distintas advocaciones. La Venus romana era la Genitrix, la madre de todos los romanos, una diosa que representaba la honestidad. La Venus Ericina era una diosa del amor desenfrenado, de las pasiones desatadas. Y en contraposición a esa Venus, se impulsó el culto a esta otra que es del amor, pero del amor bajo control. En fin, así estaban las cosas.
Gracias por tu interés, lo que me ha impedido seguir mi plan con la historia de Remo y Rómulo no ha sido nada malo, sino una acumulación de trabajo unida a requerimientos familiares. Besos.
Hola bertha, eso mismo nos preguntamos todas, ¿quién controla a nuestros controladores? Hay tanto abuso... Besazos, guapa.
ResponderEliminarHola maria antonia moreno, es que hija mía se me acumulan a veces tantas cosas que me resulta imposible llegar a todas. Espero poder resolverlo en los próximos días. Besos, querida amiga.
Hola isabel martínez barquero, soy de tu misma opinión, hay que actuar y no sólo invocar ayuda. La ventaja de la invocación es que nos hace tomar conciencia precisamente del problema y de la necesidad de la acción. Espero que se me vayan resolviendo los atascos, sí. Besazos.
ResponderEliminarHola alexandria sotelo faderland, desde luego lo que no podamos resolver con nuestro propio esfuerzo nadie lo hará por nosotras. Un abrazo muy fuerte, querida amiga.
Hola maria luisa arnáiz, muy oportuna la observación que haces. Y tuvo su historia, sí. Si a alguien le apetece acercarse a ella, en mis etiquetas tengo una que se llama "Claudia y la diosa Cibeles" (son 4 posts) que cuenta precisamente las dificultades que se vivieron con motivo de la llegada de Cibeles a Roma. Besazos.
ResponderEliminarHola cayetano, muy ciertas tus palabras. Sin embargo me refería también a la situación en general, porque las políticas que se están siguiendo dejan en peores condiciones a los/las más débiles. Lo he puesto en femenino por tratarse de una diosa que recibía ese culto específicamente femenino, pero desde luego los abusos los está sufriendo toda la población. besazos.
Hola natalia tarraco, cierto es que cuando los humanos se ponen tercos (y estamos viviendo tiempos de extrema terquedad y egoísmo) no hay quien les haga recapacitar. Pero bueno, nunca está de más la ayuda divina, si es posible. Por pedir, que no quede.
ResponderEliminarEstoy deseando ver esas fotos y leer alguna crónica tuya sobre el muro de Adriano. Besazos, guapa.
Hola clarice baricco, sí, necesitamos muchísimo de todos los apoyos que podamos conseguir, sobre todo para infundirnos ánimo y confianza en que podremos vencer tanta maldad. Besotes.
Hola pedro ojeda escudero, si Venus nos envía su apoyo y contribuye a convencernos de que, unidos, podemos acabar - al menos temporalmente - con tanta injusticia, no será un mal apoyo. Besos, querido amigo.
ResponderEliminarAcabaré pensando que hasta los dioses están confabulados con los poderosos en contra del resto...¡ay!
ResponderEliminarBesos, amiga linda
Querida Isabel, ¡cuánta preocupación masculina por el recato, el pudor y la castidad de las mujeres! ¡Más valdría implorar a Iustitia que volviese a habitar familiarmente entre los mortales!
ResponderEliminarEn cuanto a los próximos capítulos, tú tranquila, ya sabes, "Festina lente".
Mil bicos, cara.
Espero que no, virgi. Aquellos dioses antiguos no tenían nada que ver con los horrores de ahora. Besazos, guapa.
ResponderEliminarPues yo quiero un ataque de pasión. Pasión desenfrenada para la mayoría, una pasión gorda gorda que nos haga salir a la calle todos los días hasta conseguir que se nos escuche y se nos respete y acabar con este desastre que son las pasiones de unos pocos.
ResponderEliminarAmén.
:P
Un beso