Dedicado a Paco Hernández
Volturno, el esclavo de la domina Claudia, descendía por la
Vía Nova de camino al mercado de bueyes acompañado por un colega de la casa
vecina. Ambos charlaban con animación sin dejar de quejarse.
- ¡Por fin se va ese viejo al que recibimos con tanta
alegría hace apenas doce meses – dijo Volturno.
- Váyase de una vez, sí, el viejo año, pues nos ha traído
muchos males y ningún bien – respondió el otro.
“Y yo os dejo tan ignorantes como os encontré, pobres
humanos” – dijo una voz susurrante y ronca procedente del bosquecillo situado
tras la casa de las Vestales –. “¿Acaso tengo yo la culpa de vuestras penurias
o de que hayáis tomado malas decisiones? ¿Ha sido voluntad mía el repartir más
pobreza a los débiles y más riqueza a los ricos? ¿Os atrevéis a atribuirme toda
la injusticia? ¡Ay, qué felices viven quienes abusan de vosotros, porque sobre
sacar provecho de vuestro esfuerzo y sudor, aún me tienen a mí, viejo decrépito
y exhausto, para echarme la culpa.
Y vosotros, desdichados, en lugar de vituperarme y de afilar
vuestras lenguas contra el año nuevo que espera mi partida para cruzar la
puerta, haríais bien en dejar de repetir las palabras de quienes os oprimen y
usar vuestras propias cabezas. Pensad: “¿qué puedo hacer yo para cambiar las
cosas?”.
NOTA: Queridos amigos, os deseo mucha felicidad para año
2013 y, sobre todo, que seamos capaces de pensar y actuar para conseguir la
sociedad que queremos sin esperar que lo hagan otros.